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Sabor à Ibero-América: Deyvis Dávila e a receita de “Mi causa”
Em 20, set 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
A causa limenha é um dos pratos tradicionais do Peru, um prato que data da época do virreinato, vendido nas esquinas das ruas de Lima para apoiar a “causa” da independência. Deyvis Dávila, cozinheiro peruano que vive em Montevidéu (Uruguai), contou a história do prato ao apresentar “sua causa” no concurso “Sabor a Ibero-América”, lançado este ano pelos programas de cooperação ibero-americana nas áreas de cultura, cozinha e migração.
A receita, uma das 10 premiadas do concurso, é uma das favoritas do cozinheiro, que a aprendeu com sua avó quando tinha 13 anos. “Estava na escola e pediram que preparássemos um prato para um concurso pelas festas pátrias. Não tive dúvidas de que meu prato seria ‘a causa’. Pedi à minha avó que me ensinasse e ela, ao ver minha emoção, me ensinou”, escreveu Deyvis. “Acredito que foi essa experiência que me fez estudar gastronomia”.
Nome da receita: Mi causa
* Ingredientes | Quantidades: 200 gr de papa amarilla, pasta de ají causa 2 cucharadas, sal, pimienta en pequeña cantidad, palta media unidad, huevo hervido media unidad, 100 gr de pollo hervido deshilachado, mayonesa, aceituna dos unidades, medio limón, una hojita de cilantro.
* Modo de preparação: Primero elegir la mejor papa, la amarilla. Esa papa con textura deliciosa, compacta, que hace que todos los ingredientes se conviertan en uno. Se cocina la papa amarilla, se tritura y amasa, con pasta de ajì amarillo. Para hacer la pasta se hace hervir el ají causa, para quitarle el picor. Después se licua y se vierte de a poquitos a la masa de papa. Se le agrega limón en pequeña cantidad, se salpimienta la masa. Y se deja reposar. Para el relleno se hierve huevo, zanahoria, pollo y se hace una especie de crema. El pollo se mezcla con mayonesa. La papa amasada se pone en un molde circular, formando dos capas. Se pone la primera capa, se rellena con el pollo, palta, se añade la otra capa y sobre la superficie se adorna con aceituna, huevo y una hojita de cilantro.
A história da receita, por Deyvis Dávila
La causa limeña es uno de los platos tradicionales del Perú, un plato infaltable en los agasajos familiares. Este plato data de la época del virreinato donde no se conocía con un nombre específico; fue con la llegada del libertador José de San Martín que para solventar los gastos de la campaña militar, en las esquinas de las calles limeñas se vendía este plato para apoyar a “la causa” de la independencia; es en este contexto en que el plato ganó el nombre de “causa”.
Este es uno de mis platos favoritos, el plato que se hacía esperar cada viernes al terminar la semana en el comedor popular donde mi abuelita cocinaba. Yo era infaltable y esperaba sentado en la mesa la llegada de mi platillo favorito, y al llegar primero lo comía todo junto lo que hacía sentir un sabor indescriptible, ese toque de limón, esa frescura y esa contundente papa amasada que te dejaba lleno. Luego me dio mucha curiosidad y cuando me servían el plato empecé a separar las capas de papa y los otros ingredientes para saber qué era eso que tanto me gustaba. Era aún pequeño y mi abuela no nos dejaba entrar mucho a la cocina por el miedo a quemarnos, siempre me quedé con las ganas de aprender. Un día cuando tenía 13 años estaba en la secundaría, pidieron que preparáramos un plato para representar en el concurso por las fiestas patrias, en ese momento no dudé que mi plato a presentar sería la causa. Le pedí a mi abuela que me enseñara y ella al ver mi emoción me enseñó.
Desde ese entonces siempre traté de mejorarlo y fue mi forma de agasajar y demostrar mi cariño a mi familia y amigos al prepararlo. Creo que fue esa experiencia la que me hizo estudiar cocina. Dicen que hay experiencias que te marcan y cada vez que hago este plato, regreso al viernes último de julio, en el centro de mi colegio, donde junto con todos los otros platillos, esperaba con ansias al jurado para que probara mi preparación.
Las adaptaciones
Actualmente mi mayor reto es encontrar la papa especial, aquí en Uruguay se comercializa sólo dos tipos de papa, la blanca y rosada, ninguna con la textura ideal para el plato. Sin embargo, buscando en ferias pude encontrar una papa rosada con textura que se asemeja a la papa amarilla, no es tan húmeda y permite que el plato se pueda preparar sin romperse la masa al finalizar. Otro de los inconvenientes que tengo es la pasta de ají amarillo o causa, aquí no se comercializa, pero en Argenper, local de insumos peruanos, venden sachet de pasta procesada que me permite asimilar un poco el sabor.
Por lo demás el resto de insumos los tengo al alcance de la mano, excepto la palta, que al comercializarse muy poco, se tiene que encontrar en comercios alejados y la mayoría lo venden verde, así que si quiero realizarlo, debo comprar con tiempo la palta, y tenerla en casa para que se madure.
Siempre tuve presente ese plato. Empecé cocinándole a mis amigos para sus cumpleaños o algún evento particular y actualmente tengo mi pequeño emprendimiento de comida peruana, es mi plato principal de entrada y uno de los más pedidos. Los uruguayos también han sabido integrar la causa a su lista de pedido, para ellos no ha sido muy difícil acogerla porque la papa aquí también se consume mucho, obviamente han quedado encantados con ese toque de frescura y sabor que el plato les brinda.
Sabor à Ibero-América: Ederlinda Rojas e os espetinhos de coração
Em 19, set 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
O anticucho é um prato típico peruano, tradicional das Festas Pátrias, durante o mês de julho. Esta porção de coração de boi temperada e cuidadosamente frita na brasa de uma churrasqueira é uma receita que Ederlinda Rojas aprendeu com uma tia, e ela de sua avó. A história deste prato foi uma das 10 selecionadas no concurso “Sabor à Ibero-América”, lançado pelos programas de cooperação IberCultura Viva e Iber-Rutas, a iniciativa Ibercocinas e a Secretaria Geral Ibero-americana.
“Aos 11 anos gostava muito de visitar minha tia nas férias em Motupe (Lambayeque, Perú), ela vendia fora de casa churrasco e espetinhos”, conta Ederlinda no texto apresentado ao concurso. “Me chamava a atenção ver como aqueles pedaços de carne, colocados em uns palitos, eram assados naquele fogo implacável sem se queimar, e exalando um cheirinho particular que fazia as pessoas ficarem paradas ao redor da churrasqueira esperando ansiosamente por sua porção”.
Em Montevidéu (Uruguai), cidade onde hoje reside, Ederlinda prepara esta receita (com algumas adaptações) em ocasiões especiais, como um domingo de visita de amigos compatriotas ou um aniversário em que a maioria de convidados é peruana. Os amigos uruguaios e estrangeiros, segundo ela, também sabem receber esse prato com agrado.
Nome da receita: Anticuchos del corazón
* Ingredientes | Quantidades: Para una porción de 3 brochetas: 300 gr de corazón de res (aproximádamente 100 gr por palito), 3 palitos para brochetas, vinagre 50 ml, ajo picado (una cucharada), sal (una media cucharada grande), pimienta, comino, ajinomoto (una cucharadita pequeña), pasta de ají, panca (una a dos cucharadas), sillao (un chorrito). Probar y sazonar al gusto. Acompañar con choclo, camote y papa hervida (media unidad de cada uno), también crema de rocoto y mayonesa.
* Modo de preparação: La preparación que aprendí fue primero a cortar los trozos de corazón de res. Son tres trozos por palito, que se deben de cortar con un grosor y tamaño algo cuadrado y un poco grande (100 gr por palito) para que al poner bajo fuego pueda cocinarse sin secarse ni romperse el pincho. Luego en un tazón se condimenta vinagre, ajo, finamente cortado o rallado, la popular pasta ají panca. Estos ajíes son secos, primero se retira la semilla para después ser licuado.
Para la preparación de la pasta:
En una olla con agua caliente se dejan remojar unos ajíes secos, lo que hace que la piel se ablande y no tenga ese picor particular del ají fresco, para poder posteriormente licuarse con un poquito de aceite, esto es lo que le da el sabor particular al plato. Esa mezcla se vierte en el tazón con los otros ingredientes. Se pone sal, pimienta, comino, ajinomoto, un toque de sillao al gusto.
Por otro lado, los trozos de corazón tienen que ser bien lavados con un poquito de sal para quitar la sangre y dejarlos escurrir, para después ser vertidos en el tazón del aderezo. De esta forma queda encurtiéndose de sabor. Puede prepararse en la noche para ser cocinado al dìa siguiente.
Posteriormente los trozos de carne son insertados en los pinchos para ser cocinados bajo fuego, que también tiene su secreto al momento de fritarse, pues se utiliza una especie de brocha casera que se hace con la panca de chocho, la que se utiliza junto con parte del aderezo y chorrito de aceite para ir rehidratando la brocheta cuando se va cocinando, lo que hace que no pierda el sabor. Este peculiar y sabroso plato va acompañado de su infaltable choclo de dientes grandes, papa, camote y sus cremas de rocoto y mayonesa.
A história da receita, por Ederlinda Rojas
El anticucho es uno de los platos bandera de la comida peruana, en su simpleza representa la más cálida acogida a la familia que llega de visita un domingo por la tarde, a las ferias populares, a la actividad pro salud para ayudar a un amigo o familiar enfermo, o simplemente comerte ese ansiado antojo, esa porción de corazón de res aderezado y cuidadosamente frito bajo las brasas de una parrilla.
La receta la aprendí de una tía y ella de mi abuela. A los 11 años me gustaba mucho visitar en vacaciones a mi tía en Motupe (Lambayeque, Perú), ella vendía fuera de su casa parrillada y anticuchos. Me llamó mucho la atención, ver cómo los trozos de carne insertados en unos palitos se cocinaban con el implacable fuego sin quemarse, pero esbozando un olorcito particular que hacía a las personas quedarse paradas alrededor de la parrilla esperando por su ansiada porción. Fue en ese entonces en que quise aprender no solo la entrega en el plato o la mano, sino la preparación.
El anticucho es un plato típico peruano que como tal se popularizó durante la época colonial, siendo uno de los platos más importantes servidos a los esclavos del antiguo Perú. Se caracteriza por el uso de corazón de res insertado en un pincho y asado bajo el fuego de una parrilla. En Perú, es considerado un plato tradicional de las Fiestas Patrias, durante el mes de julio, como parte de las tradiciones gastronómicas de las festividades.
Desde que aprendí hacer ese platillo, al regresar a mi casa de vacaciones siempre me pedían hacerlo, y cada vez que lo realizaba sentía la misma sensación que al estar en casa de mi tía, esa sensación de ver a la gente esperar su brocheta y terminar con una sonrisa de agradecimiento.
Describir la preparación del anticucho es remontarme a mi Perú, a mi historia, a las enseñanzas alrededor de un cuchillo, aderezo, parrilla, fuego y corazón, ese corazón que como peruanos le ponemos a lo que preparamos y más cuando estas lejos y añoras las tardes en familia y los almuerzos que terminan con la gran sonrisa de satisfacción.
Las adaptaciones
Resido en Uruguay y aquí es muy difícil encontrar la base de la preparación, que es el ají para el aderezo. En Argenper, que es un comercio donde venden insumos peruanos, he podido comprar la pasta de ají procesada. Al ser pequeños sachet, la desventaja es que se tiene que comprar más cantidad para que la preparación se asemeje a la casera. Después los otros condimentos, al comercializarse en el país el aderezo, puedo seguir su línea de originalidad.
Otro tema es la parrilla, habitualmente aquí se venden parrillas o rejillas para piezas grandes de carne, lo que hace que haya mucho más fuego que el necesario para las brochetas, lo que pone en riesgo que se queme y se termine rompiendo el palito. En este caso he optado por hacerlo tipo a la plancha, aunque pierde un poco el toque del sabor que le da la brasa. Pero de igual forma se disfruta.
También en el acompañamiento con el choclo, hay un poco de inconveniente, no tenemos aquí el choclo grande, sino el pequeño de sabor dulce, que de igual forma se adapta al plato. Para la crema de ají, al no haber rocoto, utilizó el ají catalán picante, aunque para nosotros los peruanos no pica mucho (lo que hago es fritarlo con cebolla y ajo, y así tiene un sabor más rico y picante).
Actualmente aquí lo preparamos en una ocasión especial, un partido de Perú, un domingo de visita de amigos compatriotas que se reúnen para hacer un almuerzo en casa, un cumpleaños donde la mayoría de invitados son peruanos, y los amigos uruguayos y extranjeros han sabido recibir con agrado ese platillo. Aquí el corazón de res no se consume mucho, pero en esta preparación han sabido apreciarlo.
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Sabor à Ibero-América: Josahandi Avila e a “cochinita pibil”
Em 18, set 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
Cozinheira por herança, de raízes mexicanas e italianas, Josahandi Avila ministra aulas de cozinha no Chile, onde vive desde 2016. A receita original da Cochinita Pibil, que foi premiada no concurso “Sabor à Ibero-América”, é de sua bisavó Margarita, originária de Yucatán (México). Sua avó ensinou a sua mãe, e sua mãe a ela, mas é uma receita em que é difícil chegar à cocção perfeita da carne. Josahandi conseguiu chegar ao ponto certo quando completou 18 anos, guiada por sua avó Blanca, que faleceu no ano passado (e de quem ela herdou a coleção de receitas escritas à mão e passadas de geração em geração).
“Com esta receita vendi tacos no México durante três anos, para ajudar a pagar a universidade. Virei a taqueira preferida de muitos transeuntes da Avenida Coyoacán. É uma receita à qual devo meus estudos, mas, sobretudo, devo a conexão com a minha avó e toda a minha linhagem materna sobre como manter nossa sazão, a importância de nossos estados de ânimo ao cozinhar, a conexão com os ingredientes para saber quanto coloco de cada um”, afirma a cozinheira, que com o passar dos anos foi aperfeiçoando a receita, e agora a prepara no Chile com a fusão de ingredientes de diferentes países.
Nome da receita: Cochinita Pibil
* Ingredientes | Quantidades:
1 kilo de carne de cerdo, en Chile el corte que funciona es Paleta de cerdo, que es la pierna del cerdo, donde hay carne, pero sobre todo grasa. Ocupamos todo, lo especial de esta preparación es la grasa para darle jugo.
2 kilos de naranja
1 kilo de limón 200 ml de vinagre
1 cucharadita de comino
1 cucharadita de pimienta
1 cucharadita de tomillo
1 cucharadita de cacao puro
1 cucharadita de ají de color
1 cucharadita de semillas de ajiote o axiote, se puede sustituir por algún aderezo adobado de carne
10 clavos de olor
1 cucharadita de perejil
Sal al gusto
4 hojas de plátano
3 dientes de ajo
½ cebolla
* Modo de preparação: Imagínate que la carne se tiene que deshacer en tu boca, que la tomas con la mano y se desarma por lo tanto tenemos que romper la malla de la carne, el cerdo es una carne dura y para llegar a esto el secreto está en marinar la carne muchas horas, yo te recomiendo que al menos sean 24 horas. Entonces sigue estos pasos.
- Vas a sacar el jugo de todas las naranjas y los limones, no le dejes semillas sino se pone acida la carne.
- En una licuadora coloca el jugo de los cítricos con los 200ml de vinagre.
- Coloca todo el comino, pimienta, tomillo, cacao, ají de color, axiote, clavos de olor, perejil, ajo, cebolla y sal.
- Licua todo esto hasta que esté bien molido.
- En un recipiente grande vas a colocar la carne, es importante que la carne esté trozada en pequeños pedazos de 5cm aproximadamente.
- Vacía todo el jugo de la licuadora a la carne y remueve bien para que toda la carne quede bien sumergida.
- Llévala al refrigerador y déjala reposar al menos 24 horas, si puedes 30 horas ¡mejor!
- Una vez transcurrido el tiempo de reposo de nuestra carne, vas a elegir una olla profunda si tienes una olla a presión será mejor, la cocción a vapor ayuda mucho a esta receta.
- Lava las hojas de plátano y sin secarlas colócalas en la olla haciendo una camita, el metal no tiene que estar en contacto con la carne así que las hojas tienen que cubrir bien las paredes. Es como hacer una canasta.
- Coloca la carne con el jugo al centro de la olla y cúbrela con el resto de las hojas de plátano.
- Coloca a fuego medio, si elegiste olla a presión serán 30min si elegiste olla normal será 1 hora 15min.
- ¿Cómo saber cuándo está lista mi carne? Cuando tú la tomes con un tenedor y se desarmé muy rápido, si aún no está así déjala un par de minutos más.
- Una vez que esté lista ahora vas a desenehebrar toda la carne.
- Cuando la tengas lista colócala en otra olla, si tiene olla de barro o greda mucho mejor, sino la de hacer también funciona.
- Dale una última cocción con todo su jugo 10 min y estará lista para servirse. La Cochinita Pibil se come en taco. El proceso completo de esta receta es con tortillas de maíz, puedes hacer las tortillas tú o puedes comprarlas hechas, importante que sean de maíz.
Si quieres hacer las tortillas te explico cómo.
- Vas a conseguir 1 kilo de maíz seco desgranado, cualquier grano de maíz funciona, importante que sea granos salados no los amarillos americanos sino te quedaran dulces. Existen granos de maíz blanco, negros, azules, morado, naranjos todos son deliciosos. Recuerda tienen que estar secos, no blandos.
- Consigue 2 cucharadas de cal, hidróxido de calcio para cocina.
- Colocas los granos en una olla de fondo.
- Disuelves la cal 2 litros de agua tibia.
- Agregas el agua con la cal a la olla con los granos. Y lo colocas a hervir 20 min.
- Ahora tendrás que esperar aproximadamente 16 horas a que reposen el maíz.
- Sabrás que el maíz está listo cuando tomes los granos y se les despegará una cascarita fina y transparente.
- Enjuaga con abundante agua el maíz y quítale la piel suelta de los granos.
- Cuela bien los granos y ahora está listo para moler.
- Muele el maíz con un molino manual de granos, se formará una masa espesa y fría.
- Una vez molido todo el maíz, puedes amasar un poco con tus manos y se formará una gran masa. 12. Forma bolitas pequeñas de aproximadamente 15 gr.
- En una bolsa de plástico extendido coloca una bolita, tápala con otra bolsa de plástico extendido y con un uslero o rodillo ve estirando hasta obtener un círculo planito y delgado.
- Calienta el sartén y ve colocando las tortillas hasta que se cocinen bien. No necesitarás colocar aceite en el sartén ya que el proceso que hiciste de la cal, que lo llamamos en México Nixtamalización, le dará calcio, elasticidad y aumentará su grasa vegetal así que no se te pegará nada.
- Para conservarlas calentitas te recomiendo en colocarlas en un canasto de cestería, puede ser mimbre, boqui, palma o cualquier material que tengas a tu alcance. Tápalas con un pañito de algodón y cierra bien la cesta.
Montagem dos tacos – Preparação prévia
Para el acompañamiento de esta receta necesitamos la salsa.
Ingredientes:
3 habaneros o cualquier chile de tu gusto, aunque la receta original y con la que mejor sabe es el habanero
½ k de tomatillo, o tomate verde
1 diente de ajo
Pimienta y sal al gusto
Receita:
- Coloca a hervir con agua los tomatillos, los habaneros, la cebolla y el ajo. Los tomatillos son de un color verde claro, cuando están bien cocinados se tornan de un verde seco.
- En la licuadora coloca todos los ingredientes sin el agua, agrega la pimienta y la sal.
- Licua hasta obtener una salsa espesa.
- Cuidado al abrir la tapa de la licuadora el vapor que sale de la salsa es picante, no te asomes que te puede irritar los ojos y la nariz, deja que se enfríe y luego sirve en un pocillo.
Montagem dos tacos
Para el armado de los tacos necesitamos limón, 1 cebolla morado rebanada en pluma y cilantro finamente picado. Una vez calentadas que tengas tu salsa, tu Cochinita Pibil y las tortillas calentitas puedes empezar a preparar.
- Coloca la carne al centro de la tortilla.
- Coloca unas gotitas de limón en la carne
- Agrega un poco de cebolla morada y cilantro.
- Si te gusta el picante agrega una cucharada de salsa de habanero. ¡Y listo, los mejores tacos de Cochinita Pibil están en tu mesa!
A história da receita, por Josahandi Avila
La receta original es de mi bisabuela Margarita, originaria de Yucatán. Mi abuelita se le enseñó a mi mamá y mi mamá a mí, pero es una receta en la que es difícil llegar a la cocción perfecta de la carne, hay que entender los tiempos al fuego y el manejo de los cítricos, más las cantidades exactas de los aliños para que no quede muy intensa pero tampoco puede quedar sin sabor. Yo recién logré llegar a la sazón cuando cumplí 18 años. A pesar de los esfuerzos de mi mamá por enseñármela no lo lograba, entonces mi abuela decidió guiarme hasta lograrlo. Con esta receta vendí tacos en México durante 3 años para ayudarme a pagar mi carrera de universitaria, me volví la taquera preferida de muchos transeúntes de Avenida Coyoacán. Es una receta a la que le debo mis estudios, pero sobre todo le debo la conexión con mi abuela y todo mi linaje materno acerca de cómo mantener nuestra sazón, de la importancia de nuestros estados de ánimo al cocinar, la conexión con los ingredientes para saber cuánto le pongo de cada uno.
Con los años he ido perfeccionando la receta, ahora la hago en Chile con toda la fusión de ingredientes de diferentes países. Creció, encontró su sazón peculiar. Con las enseñanzas en cocina también he ido aprendiendo que en la calidad de los ingredientes radica el sabor, por lo tanto en Chile apoyo al comerciante particular, la carne que ocupo para mis recetas siempre son de animales libres. En Chile se ha perdido mucho las carnicerías, las verdulerías, las fruterías, la mayoría compra en el supermercado y el pequeño comerciante ha ido desapareciendo. Yo extraño eso de México, poder salir y encontrarme con la señora que vende los limones de su limonero, el caballero que vende la carne de los animales de su granja que él cuida y mantiene. Así que esto trato de transmitir en clase a mis alumnos y también en cada receta que degustan mis comensales, hablar de lo importante que es la calidad de los ingredientes y su obtención. De alguna manera esta receta marcó mi emprendimiento, conexión y valor fue lo que me dejó.
En Chile
La primera vez que llegué a Chile fue en el año 2012, vine a conocer el país de mi pareja. Debo reconocer que no sabía mucho de Chile, era mi primera vez fuera de mi país y no tenía idea que el español se habla diferente en todo Latinoamérica, que mientras yo pedía aguacate me daban palta, que el maíz se llama choclo y es dulce, que no venden kilos de huevo sino unidades o docenas, que la tortilla no es de maíz sino de papa, verdura o trigo y un sinfín de cambios. Intenté hacer mis recetas, pero no encontré los ingredientes, fue hasta el año 2016 que yo volví a radicarme y casarme con mi pareja, cuando comenzó a abrirse la gastronómica en Chile.
Realicé una investigación para crear primero mis herramientas básicas de cocina, encontré en Villa Rica al artesano Héctor Bascuñan y en Liquiñe a Fernando Jiménez, quienes me ayudaron a confeccionar mis primeras máquinas tortilleras de madera reciclada de bosques sureños. Después en Huentelolén conocí a Juana Maribur quien me mostró la cestería en ñocha para que me hiciera unos canastos, que guardarían calentitas mis tortillas. Seguí hasta Chiloé para conocer a Eduardo Reyes quien trabaja el cobre, que por cierto es cobre mexicano y me hizo una olla para cocinar mis guisados. Todas las herramientas hechas por artesanos chilenos, todo hecho a mano.
Una vez las herramientas listas, pasé a los ingredientes y fui hasta la Vega central, en Santiago donde cada galpón reúne sabores, colores y mestizaje de ingredientes de Latinoamérica. En el pasillo de las papas me encontré un caserito que vende chile jalapeño, serrano y habanero que cosecha en Chillán, después me fui con los peruanos a comprarles su maíz salado, y a lado de ellos estaba la guayaba que traen de Colombia, dulce y jugosa como bien la recuerdo en México; más adelante están los mangos y las hojas de plátano que traen de Brasil, y todo esto lo compro tomándome un cafecito de granos de Guatemala recién tostados, que venden en un carrito en la esquina. A esto sabe Latinoamérica, esto somos. Fue gracias a este proceso que descubrí la importancia del origen de lo que cocino y el cómo mantener la tradición de mis generaciones a pesar de no estar en mi propio país.
El primer apoyo para mantener este oficio gastronómico y su difusión es Casa de Oficios, quienes me brindan un espacio para dar clases de cocina, respetando las recetas tradicionales y fusionándolas con los ingredientes obtenidos de diferentes países. Fue así que surgió mi emprendimiento: La sazón de Joss. Comencé a vender tacos, pero con la primicia de mostrarle a mi público la verdadera sazón mexicana y hacer una clara distinción con la comida tex mex, ya que aquí se conocen más esos burritos que llevan crema, lechuga y porotos envueltos en una tortilla de trigo, pero eso no es comida mexicana, la comida mexicana es el mundo variopinto de los ingredientes principales que son el maíz, los cactus, las flores y las semillas.
El cocinar para otros esta tradición y ver en sus caras la felicidad y el hallazgo de algo nuevo en cada bocado, me brinda una sensación maravillosa, es ver los años tras la cocina de mi abuelita Blanca y de mi mamá Rocío enseñándome paso a paso, donde siempre me decían el orden de los ingredientes a la olla sí altera el guisado final, respeta el orden, conéctate con la sazón de nuestro linaje, aquí vamos todas contigo. Por eso para mí es importante seguir trasmitiendo en clase y en cada cena o almuerzo que comparto esta sazón familiar, que dice mucho de mi México y de lo que somos.
Un homenaje
Esta receta la hice en honor a mi abuelita Blanca, quien falleció el año pasado, yo estaba en Chile cuando recibí el llamado que estaba grave en el hospital, sin dudar partí a verla a México. Cuando llegué encontré a mi Abue apagándose de a poco, no había abierto los ojos en días, quizá estaba esperándome, porque cuando llegué al nombrarla abrió sus pequeños ojos morochos para darme esa tierna mirada, sujete su mano y lo primero que me vino a la boca para decirle fue –Abu sigo cocinando, te llevaré a donde vaya- ella sonrió levemente y así de apoco con los días se fue apagando. Cuando la velamos mi mamá me comentó que ella me había dejado un libro muy importante, fui a su habitación y allí estaba, la colección de recetas de generación en generación, escrita a mano y por supuesto estaba mi receta favorita, la que más me costó aprender pero que ella me tuvo paciencia de enseñar, y es esta que les quiero compartir.
(*) A receita da Cochinita Pibil foi uma das 10 selecionadas no concurso “Sabor à Ibero-América”, que premia histórias de receitas culinárias tradicionais das comunidades migrantes da região. Resultado da sinergia dos programas de cooperação ibero-americana nas áreas de cultura, cozinha e migração, o concurso foi apresentado em abril deste ano pela Secretaria Geral Ibero-americana (SEGIB), os programas IberCultura Viva e Iber-Rutas e a iniciativa IberCocinas. A lista com as 10 receitas selecionadas para receber os prêmios de US$ 500 e as quatro ganhadoras de menções honrosas foi anunciada no dia 3 de setembro.
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Sabor à Ibero-América: Sulma Perez e as pupusas salvadorenhas
Em 17, set 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
Sulma Perez é uma gestora comunitária, camponesa, mãe de seis filhos e migrante exilada de El Salvador pela guerra dos anos 1980. Em Costa Rica, onde vive desde 1982, ela segue com as tradições culinárias salvadorenhas, como as pupusas, comumente preparadas em família ou para eventos comunitários e festas populares.
O ingrediente principal da pupusa é o maíz criollo, o milho utilizado para preparar a massa. “O milho é parte de nossa identidade cultural mesoamericana em cada uma de suas expressões (pupusas, tortillas, chicha, atoles, etc)”, destaca Sulma, que desde muito pequena já moía o milho na pedra em El Salvador. A receita é passada de geração a geração: a avó aprendeu com a avó, e ela ensina seus filhos e netos.
A receita das pupusas foi uma das selecionadas no concurso “Sabor à Ibero-América”, que premia histórias de receitas culinárias tradicionais das comunidades migrantes da região. Resultado da sinergia dos programas de cooperação ibero-americana nas áreas de cultura, cozinha e migração, o concurso foi apresentado em abril deste ano pela Secretaria Geral Ibero-americana (SEGIB), os programas IberCultura Viva e Iber-Rutas e a iniciativa IberCocinas. O resultado foi anunciado no dia 3 de setembro.
Nome da receita: Pupusas salvadoreñas a la leña
* Ingredientes | Quantidades: Maíz criollo, ayote, queso, loroco, frijoles, aceite, espinacas, tomate, repollo, chile picante, orégano, vinagre y sal.
* Modo de preparação: 1) Se muele el maíz tierno para preparar la masa. 2) Se preparan diferentes rellenos: frijoles molidos con queso, ayote rayado con queso, espinacas con tomate. 3) Se prepara el encurtido con repollo rallado, orégano, vinagre y chile picante. 4) Se coloca una bolita de masa en la mano, se rellena con cualquier relleno preparado y se pone al comal con aceite, que esta caliente del fuego de leña, se deja por unos minutos hasta ver que este cocinado cada extremo. 5) Se sirve de dos en dos con encurtido encima.
La historia de la receta, por Sulma Pérez
Las pupusas salvadoreñas son la comida típica del El Salvador, probablemente por la tradición instituida de generación en generación. En el caso de esta receta fue una enseñanza de mi familia, a mi abuela le enseñó la suya, yo le enseño a mis hijxs y nietxs. Comúnmente se prepara en familia o para eventos comunitarios y fiestas populares. Nos reunimos en grupos de mujeres a preparar pupusas, siendo esto un espacio de intercambio y trabajo colectivo. Los ingredientes en su mayoría son frescos del mercado o sacados de la huerta.
Esta receta se sigue conservando de generación en generación, ya que es una comida cotidiana, en la comunidad migrante salvadoreña y es común su preparación en casa de familias. La receta ha tenido que ser modificada ya que se ha tenido dificultad con conseguir ingredientes tradicionales como el loroco; y por motivos económicos y de salud se ha evitado hacerlas con carne, como se hace en la actualidad. Algunos ingredientes por lo que se reemplazan son el ayote rayado, los frijoles molidos, las espinacas y el tomate a cambio de la carne. En nuestro caso, la mayoría cosechados de la huerta en casa, o comprados/intercambiados a vecinos de la comunidad. La receta vegetariana ha despertado interés de personas vegetarianas o que prefieren alimentos sanos sin carne, por lo que se ha vuelto común en los últimos años.
En nuestra comunidad de Longo Maï, aquí en Costa Rica, es el plato más aclamado por el turismo y voluntarios que nos visitan, para festivales comunitarios, actividades de la iglesia y de la escuela. Actualmente hacemos talleres de pupusas para los visitantes, con ventas de las mismas, ayudando a la economía familiar. Es común pasar a casa de cualquier persona de la comunidad y que te ofrezcan una deliciosa pupusa con café. Cada quien le pone su sabor y detalles personalizados haciendo esto una tradición que emigró también con nuestras familias y seguirá en la mesa de salvadoreñas, ticxs, nicaragüenses, etc.
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Em 16, set 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
A primeira colocada no concurso “Sabor à Ibero-América”, Djanira Abreu, é uma artista visual brasileira que vive na cidade de Santa Fé, na Argentina. A receita premiada, a feijoada baiana que a mãe lhe ensinou, é um prato que sempre lhe foi servido com afeto e que segue à sua espera na mesa da família quando ela viaja ao Brasil. Na Argentina, Djanira cozinha a feijoada quando é tomada por sentimentos nostálgicos. Ela gosta das memórias que acompanham as cores, texturas e sons da receita.
A feijoada também é um prato que costuma estar presente nos ensaios da Roda de Samba, grupo de Santa Fé formado por músicos argentinos e brasileiros que às vezes se reúne na casa da artista. “O ensaio mais parece uma desculpa entre amigos para compartilhar a feijoada, cantar, tocar e dançar samba”, conta a brasileira no texto apresentado ao concurso.
“Sabor à Ibero-América” é resultado de uma sinergia dos programas de cooperação ibero-americana nas áreas de cultura, cozinha e migração. O concurso, que premia histórias de receitas culinárias tradicionais das comunidades migrantes da região, foi apresentado em abril deste ano pela Secretaria Geral Ibero-americana (SEGIB), os programas IberCultura Viva e Iber-Rutas e a iniciativa IberCocinas.
A lista com as 10 receitas selecionadas para receber os prêmios de US$ 500 e as quatro ganhadoras de menções honrosas foi anunciada no dia 3 de setembro. A partir de hoje vamos publicar na página web do IberCultura Viva as receitas, suas histórias e modos de preparação.
Nome da receita: Feijoada Baiana de mi Madre
* Ingredientes | Quantidades: 2 kg de porotos mulatinho; 1 kg de carne para puchero; ½ kg de pata de vaca; 1 kg de charqui; 500 g de mondongo; 500 g de chorizo ahumado; 300 g tocino o panceta ahumada; 3 calabresas; 3 cebollas grandes; 6 dientes de ajo; 2 pimientos (1 rojo y otro verde); 4 tomates grandes; colorau (urucum en polvo); comino; 4 hojas de laurel; jugo de 2 limones para lavar el mondongo; ciboulette, perejil, cilantro y menta, todos a gusto.
* Modo de preparação: 1. Dejar los porotos en remojo la noche anterior por mínimo 12 horas; 2. Colocar el charqui y la calabresa en una olla con agua hasta hervir durante 15 minutos, aproximadamente. Repetir el proceso más una vez. Desechar ese agua. Cortar el charqui en trozos medianos y la calabresa en rodajas. Reservarlos. 3. Preparar el aliño de la feijoada picando los tomates, el ajo, las cebollas, los pimientos y las hierbas frescas. Machacar a todo en un mortero. Acrescentar los condimentos en polvo. Separar una parte para el momento de condimentar las carnes y otra para los porotos; 4. Sacar la grasa del mondongo y cortarlo en trozos grandes. Lavarlo con bastante agua. En seguida ponerlos juntamente con la pata de vaca en un recipiente con agua y el jugo de limón. Esperar 5 minutos. Lavar nuevamente con agua limpia. Después de totalmente limpios acrescentar una parte del aliño y poner a cocinar. Acrescentar sal a gusto. 4. Cuando la pata y el mondongo ya estén blandos acrescentar el charqui, los embutidos (paio y calabresa), el charqui y las otras carnes. Acrescente también las hojas de laurel, los porotos con el agua de remojo y la otra parte del aliño. Dejar cocinar todo hasta que las carnes y los porotos estén blanditos.
A história da receita, por Djanira Abreu
En Brasil hay dos versiones sobre el origen de la feijoada. Una de ellas atribuye su creación a los africanos esclavizados en el periodo colonial de Brasil. Según esa versión, ellos se utilizaban de las partes de la vaca y del cerdo despreciadas por los portugueses, como las orejas, lenguas, patas, etc. y se las cocinaban juntamente con los porotos negros, resultando en la feijoada. Actualmente, prevalece una corriente de pensamiento por parte de algunos investigadores, defensores de la idea de que el plato, en realidad, proviene de la culinaria europea. La feijoada sería una parienta de los guisos, cazuelas y pucheros que ya existían en la región ibérica de Europa. Y que también, al contrario de lo que se pensaba, los europeos sí hacían uso de las vísceras y partes inferiores de los animales en sus comidas, incluso la sangre era aprovechada. Un ejemplo de eso son las morcillas, chorizos, fiambres.
La receta tuvo algunas adaptaciones en Brasil, como: la sustitución del poroto blanco usado en Europa por el poroto negro del continente americano; la impronta cultural de las mujeres africanas esclavizadas, pues a ellas les estaba destinado el laburo de cocinar para todos; la incorporación de la farofa, plato hecho a base de fariña de mandioca (harina de mandioca) como acompañamiento fundamental de la feijoada. En este último caso, una influencia de la culinaria de los pueblos originarios de América, los cuales tenían la mandioca como uno de los alimentos básicos de su cocina. Los porotos negros también integraba a ese sistema alimentario. La feijoada como plato brasileño surgió alrededor del siglo XIX.
La feijoada es consumida en todo Brasil. Conforme la región del país puede haber alguna variación en la elección de los ingredientes, o en la forma de condimentar, o entonces en el tipo de guarnición que la acompaña. Por ejemplo, el arroz blanco, la couve (vegetal de la familia de la cale, de los repollos) rehogada con panceta y las naranjas en fetas, son acompañamientos de la feijoada en lugares como Río de Janeiro, São Paulo, Minas Gerais; en Bahía, no es común servir la couve y las naranjas con la feijoada. ¡Lo que sí, no se puede faltar en la feijoada baiana es la salsa picante para acompañarla! La salsa se sirve aparte, por si existe alguien que no le gusten los picantes. Otra diferencia de la feijoada baiana para las demás es el empleo de porotos marrones – conocidos como mulatinho – en lugar de los negros.
Además, existen variaciones de la receta que van ocurriendo en cada familia. A veces por cuestiones de salud se suprime algún ingrediente con la intención de disminuir el contenido de la grasa y la sal. En la receta de mi madre no esta la costilla de cerdo salada, ni la pata de cerdo salada, y en lugar de añadir panceta y tocino, le pone solo el último. Otras veces, por cuestiones de economía, no se compra mucha variedad. Lo fundamental para el sabor característico de una feijoada: los porotos, obvio; algo de carne salada (charqui, por ejemplo) y algún ingrediente ahumado (panceta, chorizo ahumado).
En Río de Janeiro el plato adquiere un valor simbólico importante, al punto de ser reconocido como la feijoada tradicional brasileña. Creo que eso se explica por el hecho de existir en la cultura popular del estado elementos que se relacionan íntimamente con la feijoada – como el carnaval y el samba carioca. El trío feijoada, samba y carnaval conforman la base de la identidad de Rio de Janeiro.
Para entender mejor cómo se dió la relación entre ellos, es necesario remontarse a fines del siglo XIX y comienzos del XX. Después de la llamada abolición de la esclavitud en Brasil, en el año de 1888, hubo un gran contingente de personas ex-esclavizadas y sus descendientes que migraron de Bahía hacia Río de Janeiro, en búsqueda de trabajo en el puerto de la capital de la República. La mayoría de ellas se ubicó en los caseríos de la Plaza Once, posteriormente denominada como “La Pequeña África”. El lugar se puso bastante conocido en la ciudad, debido a las fiestas organizadas por las tias baianas en sus casas; con mucha música, baile y comida sabrosa.
Las tias baianas, mujeres de ascendencia africana que llegaron a Río de Janeiro junto a esa ola migratoria, adeptas del candomblé (religión afrobrasileña), musicistas y líderes comunitarias muy respetadas en su barrio; fueron las creadoras del ambiente cultural que propició el surgimiento y desarrollo del samba de Río de Janeiro en los comienzos del siglo XX. Incluso, fue en una de esas reuniones realizadas en la casa de la Tía Ciata que surgió la composición del primer samba grabado, Pelo Telefone. Muchas de ellas tenían puestos de comidas en la calle y eran excelentes cocineras. La feijoada, por ser sustanciosa y muy apreciada por la mayoría de la gente, era la comida predilecta para alimentar a todos durante los varios días de fiesta.
Algunas de las tias baianas fueron las fundadoras de las primeras agrupaciones carnavalescas en los barrios periféricos de la ciudad, llevando también la feijoada para el contexto del carnaval. Entre las más conocidas estaban la Tía Ciata, Tía Carmen, Tía Amélia, Tía Carmen, Tía Perciliana. Es así cómo se construyó el fuerte vínculo entre el samba, la feijoada y el carnaval. Las populares feijoadas de las escuelas de samba y las feijoadas pre-carnaval siguen manteniendo esa tradición en la actualidad.
Más allá de las rodas de samba y del carnaval, la feijoada se hace presente en eventos que reúnen a una gran cantidad de personas. Como ejemplo, se puede decir de la costumbre en los barrios periféricos de alguién convocar a sus vecinos a que se junten para ayudar a construir su casa, como retribución se les ofrece una feijoada.
En familia
La receta me la enseñó mi madre. Desde chica me gustaba ayudarle en la cocina. Casi siempre yo me ponía a su lado para observar como ella preparaba mis comidas preferidas. Con mi hermana seleccionaba los porotos dispuestos arriba de la mesa, separando los granos buenos y descartando a los que no tenían buen aspecto. Me acuerdo que ese proceso era muy divertido para nosotras. Con los años, aumentaron las responsabilidades en el hacer de la feijoada: preparar la farofa; ayudar a cortar las cebollas, los tomates; alcanzar los ingredientes o utensilios mientras mi madre cocinaba. En verdad, mi participación siempre fue ayudar y después sentarme a la mesa a comer. El rol de comensal posibilita que nos ubiquemos en un lugar receptivo, de apertura a las impresiones más íntimas que la otra persona logró transferir a la comida.
Diferentemente del cotidiano feijão (poroto) con arroz brasileño, la feijoada siempre fue un plato preparado en determinadas ocasiones. Antes había la costumbre, en muchas familias, de servirla los domingos o sábados. Actualmente, esa costumbre ha cambiado para fechas más especiales, como cumpleaños o alguna otra celebración importante para la familia. Mi madre la sigue haciendo, pero con menos frecuencia que antes. Ya no le pone más tocino, por cuestiones de salud. Pero me contó que alguna vez u otra cocina una feijoada completa a pedido de mi padre. ¡A él sí le encanta una feijoada con todo! Y también todos los años que yo viajo a Brasil para visitar a mi familia, ella siempre me espera con su rica feijoada.
Las adaptaciones
Para hacer la receta, tuve que promover algunas adaptaciones: primero, el característico poroto mulatinho de las feijoadas de Bahía, lo sustituí por porotos negros. Aún no los he encontrado acá en la ciudad de Santa Fe. La fariña para la farofa, por suerte se consigue fácil en las dietéticas; allí también me compré los porotos. El urucum lo reemplacé por pimentón ahumado y un condimento para carnes que yo lo supe comprar en la misma dietética . En estos locales hay mucha variedad de polvos para las comidas. El charqui, otro ingrediente que confiere un especial sabor al plato, tampoco lo encontré. El tocino, lo reemplacé por la panceta ahumada, también usada en las feijoadas y más fácil de conseguir por acá.
Para comprar las carnes frescas, seguí la orientación de mi madre que me aconsejó a buscar un corte de carne que se usa para los guisos; chorizo, alguna carne con hueso, y también algo de carne de cerdo. Resolví comprar puchero común y huesitos de cerdo. De embutidos puse salchicha parrillera y chorizo especial, en lugar del paio y de la calabresa, pues no conseguí encontrar algo más parecido.
En Argentina existe una tradición de embutidos artesanales y caseros que todavía me falta conocer mejor. Por eso, pienso que para las próximas feijoadas, conseguiré encontrar otras opciones. El mocotó, así llamamos en Brasil el corte de la pata de la vaca, lo busqué y no lo ví en ninguna carnicería. De todos modos, la dificultad para encontrar los ingredientes no fue muy grande en comparación a otras comidas brasileñas. A pesar de que no logré conseguir algunos de ellos, creo que ha resultado muy sabrosa la versión santafesina de la feijoada baiana. Al menos ha sido muy elogiada por la gente invitada.
Los mayores beneficios de hacerla en Argentina están relacionados al plan de lo simbólico. He logrado acceder a valores subjetivos existentes en el acto de cocinar y de comer que únicamente se me presentaron al encontrarme en la condición de migrante. Cuándo me invaden los sentimientos de añoranza, mi cuerpo se llena de memorias. En esas ocasiones, resuelvo cocinar una feijoada. Entonces, el sabor de la comida ausente se hace presente en mi boca. Sus colores, texturas y sonidos me hacen recordarlas con vehemencia. Mi corazón vuelve a sentir el calor del plato que me fue servido con afecto.
También suelo cocinarla para los ensayos de samba en mi casa. La Roda de Samba, grupo de Santa Fe formado por músicos argentinos y brasileños que tocan samba brasileño, muchas veces vienen a ensayar en mi casa y aprovecho la ocasión para hacer la feijoada. Generalmente somos veinte personas, entre los y las integrantes y algunos otros invitados. El ensayo de la Roda de Samba más parece a una excusa que hacemos entre amigos para compartir la feijoada, cantar, tocar y bailar samba.
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II Encontro Nacional de Organizações Culturais Comunitárias do Chile: três dias de intercâmbios e reflexões
Em 10, set 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
Em El Molle, comuna de Vicuña (Região de Coquimbo), reuniram-se de 6 a 8 de setembro 110 representantes de Organizações Culturais Comunitárias (OCC) provenientes de todas as províncias do Chile. O II Encontro Nacional foi organizado pelo Ministério das Culturas, das Artes e do Patrimônio, através do programa Red Cultura, cujos funcionários/as encarregados em todo o país também foram convocados.
Este segundo encontro nacional foi um espaço de intercâmbio e reflexão em torno do aporte que as organizações culturais comunitárias vêm realizando em prol do desenvolvimento cultural do país. Durante as extensas jornadas de trabalho setorial, os representantes puderam trocar estratégias de incidência em nível local e regional a partir de suas experiências em cultura comunitária. Junto com isso, discutiram fórmulas de financiamento e autogestão para avançar em seus objetivos. Também houve espaço para dialogar acerca de como o fazer cultural das OCCs se vincula com a política cultural vigente, especialmente no que diz respeito aos conteúdos materializados através do programa Red Cultura.
O seremi (secretário regional ministerial) de Culturas, Artes e Patrimônio da Região de Coquimbo, Francisco Varas, destacou durante o encontro que as conversas desenvolvidas, relacionadas aos processos culturais nos territórios, serão insumos importantes para as autoridades do ministério, como orientação para “como ir implantando nos territórios e como apoiar para que cada uma das comunas, tanto do país e em especial da Região de Coquimbo, vá se desenvolvendo harmonicamente”.
Varas também ressaltou que “a nova institucionalidade cultural, o ministério, é a melhor oportunidade para seguir construindo uma melhor identidade. São vocês os que constroem a identidade cultural de cada um dos territórios que representam, e é dever do Estado, do governo e dos que estão encabeçando os serviços públicos, poder criar as ferramentas para que possam desenvolver aquilo que necessitam…. Esta nova institucionalidade segue se construindo e fomentando. De uma maneira ou outra, através deste encontro, cada um de vocês aporta um grãozinho de areia”.
Conquistas, expectativas e conclusões
Uma conquista importante alcançada durante o encontro foi a formação de uma mesa nacional autônoma de Organizações Culturais Comunitárias, a que se somaram 14 das 16 representações. Essa nova referência de cultura de base comunitária pretende ser uma contraparte frente ao Estado para representar as demandas do setor.
Uma das participantes do encontro foi Manuela Cepeda, representante do Centro Cultural El Cahuín de Molina e da Mesa OCC do Maule, rede que há cerca de quatro anos vem trabalhando de maneira colaborativa, mediante processos de articulação, tratando de incidir em nível local, provincial e regional. “Participamos da elaboração, da implementação e da execução dos planos municipais, do Pladeco. Também trabalhamos com Red Cultura, participando do orçamento do ano… Fazemos três encontros regionais por ano, para nos reconhecermos e mantermos nossos vínculos. Trabalhamos na base da confiança, de maneira horizontal”.
Manuela Cepeda assistiu ao encontro para compartilhar sua experiência em nível nacional, para reconhecer-se e enriquecer-se com seus pares. “Creio que este encontro nacional é uma instância necessária de articulação, porque podemos nos reconhecer e encontrar para discutir coisas que são válidas e são problemáticas, e que correspondem a todos. A cultura comunitária é a base do desenvolvimento dos povos e onde encontramos temáticas que nos unem e afetam a todos. Temos que fazer parte delas e assumir nossos papéis também para defender nosso território e trabalhar neles e a partir deles”.
A encarregada nacional do programa Red Cultura, María José Muñoz, comentou que as expectativas que se tinham com este encontro eram altas. “Acredito que se cumpriram, sobretudo a de reunir a maior quantidade de representantes das regiões que têm voz própria, um relato que tem a ver com o trabalho de participação cultural nos territórios, que nos parece importante dialogar, reflexionar e trabalhar em conjunto”.
A respeito das conclusões, María José disse que “efetivamente estamos fazendo um trabalho importante na incidência das organizações como agentes locais no planejamento cultural, e no acompanhamento deste planejamento, que como ministério estamos instalando nos territórios, numa elaboração conjunta. A ideia de democracia cultural está sendo levada a cabo de uma maneira ou outra, em alguns territórios com mais força que em outros, e este diagnóstico também nos permite, através deste encontro que acabamos de ter, reconhecer onde estão as fraquezas e as forças para seguir planejando desde o programa o trabalho com as organizações, e seguir em conjunto esta meta comum que temos, que é o desenvolvimento cultural territorial”.
Como representante do IberCultura Viva, quem participou do encontro foi Tania Quevedo Valencia, servidora do Ministério de Cultura e Patrimônio do Equador, que destacou a importância que teve para seu país o ingresso no programa. “Começamos a participar não só das convocatórias, mas também dos processos de construção de política cultural. Criou-se um intercâmbio técnico, o que nos permitiu construir conceitos de maneira coletiva com as pessoas”. Ela também ressaltou a importância de realizar encontros entre países, regiões e organizações. “Estamos muito contentes que este encontro esteja alcançando resultados maiores do que esperávamos… O contato cara a cara, afetivo, que abraça, discute, debate e constrói, é fundamental para o exercício cidadão”.
Tania Quevedo de Ecuador, representante @IberCulturaViva en 2° Encuentro Nacional de Organizaciones Culturales Comunitarias: "El contacto cara a cara, afectivo, que abraza, discute, debate y construye es fundamental para el ejercicio ciudadano" #OCCChile @culturas_cl pic.twitter.com/nRff740RQd
— Ciudadanía Cultural (@ciudadaniacl) September 9, 2019
Um trabalho coletivo voluntário e solidário
No Chile, são chamadas de Organizações Culturais Comunitárias aquelas que realizam ações de caráter coletivo, com sentido artístico e cultural, associadas ao desenvolvimento do território que habitam, articulam e movimentam. Trata-se de um trabalho coletivo voluntário e solidário, preferencialmente com atividades gratuitas em que prevalecem conteúdos associados a diversas práticas artísticas e culturais. As OCCs promovem o desenvolvimento local a partir de estruturas de governança e, com isso, influenciam no investimento público em cultura.
O Departamento de Cidadania Cultural fortalece a participação cultural tanto das pessoas como das organizações formadas por elas, através de distintos dispositivos e programas, como Red Cultura, que fomentam o desenvolvimento cultural local a partir de linhas de trabalho como “Fortalecimento de Organizações Culturais Comunitárias” (convocatórias públicas), os Encontros de Formação Cultural Comunitária e a formação de Mesas Regionais de OCC em todo o país.
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Texto publicado originalmente na página web do Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio: https://bit.ly/2m9KLcF
Representantes de Pontos de Cultura do Uruguai participam de oficina de formação em Montevidéu
Em 07, set 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
A Oficina de Formação II – “Marco legal da cultura e direitos de autor”, dirigida aos Pontos de Cultura do Uruguai, começou nesta sexta-feira (06/09) no Espaço Espínola Gómez, em Montevidéu. A atividade, a cargo de Luis Fernando Iglesias, professor da Faculdade da Cultura do Centro Latino-americano de Economia Humana (CLAEH), segue neste sábado, das 9h às 17h30.
A oficina é uma das atividades do projeto “Fortalecimento da Rede de Pontos de Cultura através da Formação em Gestão Cultural Comunitária”, promovido com o apoio do programa IberCultura Viva e da Universidade CLAEH entre julho e outubro de 2019.
“Formulação de projetos e apresentação para fundos existentes” foi o tema da primeira oficina, realizada nos dias 26 e 27 de julho no mesmo espaço. Esta oficina esteve a cargo de Mariné Villalba, Danilo Urbanavicius e Joaquín D’Alessandro, também docentes da Faculdade da Cultura CLAEH.
(Foto: Dirección Nacional de Cultura)
Sabor à Ibero-América: conheça as histórias de receitas selecionadas no concurso
A Secretaria Geral Ibero-americana (SEGIB), junto com os programas de cooperação IberCultura Viva e Iber-Rutas e a iniciativa IberCocinas, anunciaram nesta terça-feira 3 de setembro o resultado do concurso “Sabor à Ibero-América”, lançado em abril para premiar histórias de receitas culinárias tradicionais das comunidades migrantes da região. As 10 propostas selecionadas receberão prêmios de US$ 500 cada.
Além das 10 ganhadoras, a Comissão Avaliadora decidiu conceder quatro menções honrosas (sem prêmios em dinheiro) a postulações que não se ajustavam aos requisitos de premiação por não se tratar de pessoas migrantes, mas que apresentavam nas receitas as histórias de migrações de seus ancestrais.
Fruto de programas de cooperação dos países ibero-americanos nas áreas de cultura, cozinha e migração, o concurso buscou fortalecer a visão da Ibero-América como uma região cujo desenvolvimento está estreitamente vinculado às migrações internacionais. Sua meta era dar visibilidade às experiências de interculturalidade que se dão através da cozinha tradicional e da inovação criativa como expressão da diversidade.
As inscrições de “Sabor à Ibero-América” estiveram abertas de 3 de abril a 15 de julho de 2019 na plataforma Mapa IberCultura Viva. Podiam participar do concurso maiores de 18 anos de nacionalidade e residência em algum dos 22 países ibero-americanos. As propostas deveriam incluir uma receita da comunidade de procedência do postulante, a história por trás dela e a forma como essa receita se insere na sociedade de acolhida, no contexto de uma experiência migratória.
Das 43 inscrições enviadas ao concurso, 42 foram habilitadas e passaram para a segunda etapa da convocatória. Entre os critérios de avaliação estavam a representatividade da preparação para a comunidade de origem; o processo de interculturalidade na experiência de inserção na comunidade receptora; a originalidade da história; a origem da receita, ingredientes e sua história, e a presença de significados e valores associados.
Confira a ata com o resultado do concurso:
Informação aos Interessados III: Etapa de seleção – Concurso Sabor à Ibero-América
A seguir, apresentamos alguns trechos das receitas premiadas e das reconhecidas com as menções honrosas. Nos próximos dias, publicaremos as receitas ganhadoras do concurso, acompanhadas de suas histórias e modos de preparação.
AS 10 PREMIADAS
- Nome da receita: Feijoada Baiana de mi Madre
- Nome da candidata: Djanira Nascimento Abreu
- País de nascimento: Brasil
- País de residência: Argentina
Um trecho da história da receita:
“La receta me la enseñó mi madre. Desde chica me gustaba ayudarla en la cocina. Casi siempre yo me ponía a su lado para observar como ella preparaba a mis comidas preferidas. Con mi hermana seleccionábamos los porotos dispuestos arriba de la mesa, separando los granos buenos y descartando a los que no tenían buen aspecto. Me acuerdo que ese proceso era muy divertido para nosotras. Con los años, aumentaban las responsabilidades en el hacer de la feijoada: preparar la farofa; ayudar a cortar las cebollas, los tomates; alcanzar los ingredientes o utensilios mientras mi madre cocinaba. (…)
“Los mayores beneficios de hacerla en Argentina están relacionados al plan de lo simbólico. He logrado acceder a valores subjetivos existentes en el acto de cocinar y de comer que únicamente se me presentaron al encontrarme en la condición de migrante. Cuándo me invaden los sentimientos de añoranza, mi cuerpo se llena de memorias. En esas ocasiones, resuelvo cocinar una feijoada. Entonces, el sabor de la comida ausente se hace presente en mi boca. Sus colores, texturas y sonidos me hacen recordarlas con vehemencia. Mi corazón vuelve a sentir el calor del plato que me fue servido con afecto. También suelo cocinarla para los ensayos de samba en mi casa. La Roda de Samba grupo de Santa Fe, formado por músicos argentinos y brasileños que tocan samba brasileña, muchas veces vienen a ensayar en mi casa y aprovecho la ocasión para hacer la feijoada. Generalmente somos un total de veinte personas, entre los y las integrantes y algunos otros invitados. El ensayo de la Roda de Samba se parece más a una excusa que hacemos entre amigos para compartir la feijoada, cantar, tocar y bailar samba”.
- Nome da receita: Encoca’o de sancocho de pescado
- Nome da candidata: Clara Inés Palacios Burbano
- País de nascimento: Colômbia
- País de residência: Uruguai
Um trecho da história da receita:
“Soy colombiana, provengo de la zona del río San Juan, del corregimiento de San José del Salado (300 habitantes), con cuna donde se ubica una de las dos torres mudéjar de Latinoamérica, en el Valle del Cauca. Si bien en mi pueblo no hay tradición fuerte por los frutos del mar, en casa gracias a mi padre, mi madre, mi abuela y su pasión por la comida de mar, desde muy pequeña consumíamos semanalmente pescado o mariscos. Cuando yo tenía 5 años, hace ya 37 años, fuimos en familia a Buenaventura, a un humilde pero renombrado restaurante ubicado en una casa de palafito junto al mar, “Donde Pancha”, que era una mujer negra recelosa de sus recetas, cuya sazón hizo que varios presidentes de Colombia la visitaran en su humilde casa/restaurante. Llegamos muy temprano, lo que permitió que mi madre con su dulzura campesina, “le cayó en gracia” a la cocinera y por ello fué participe de la elaboración del sancocho de pescado, la misma Pancha le explico a mi mamá como lo elaboraba, diciéndole que el secreto era el amor.
La receta la comenzamos a preparar en casa desde ese entonces y la hemos ido mejorando a medida que ha pasado el tiempo, en principio mi madre y luego yo también comencé a hacer aportes, que han permitido perfeccionarla y explorar con aciertos y fracasos. Regularmente la realizamos para cumpleaños en especial el de mi papá o alguna festividad especial, cuando hay buen tiempo de sol, se realiza en fogón de leña y se comparte en familia, ya tiene muy buen reconocimiento, nos llaman a preguntar cómo la hacemos. Y muchos invitados que en principio manifestaban su total disgusto por el pescado, han pedido hasta 3 platos. Una vez preparé un sancocho para compañeros de la universidad y un profesor alemán que se supone era alérgico al pescado, pidió dos platos y su alergia no apareció por ningún lado”.
- Nome da receita: Anticuchos del Corazón
- Nome da candidata: Ederlinda Santos Rojas Yaipen
- País de nascimento: Peru
- País de residência: Uruguai
Um trecho da história da receita:
“El anticucho es uno de los platos bandera de la comida peruana, en su simpleza representa la más cálida acogida a la familia que llega de visita un domingo por la tarde, a las ferias populares, a la actividad pro salud para ayudar a un amigo o familiar enfermo, o simplemente comerte ese ansiado antojo.
La receta la aprendí de una tía y ella de mi abuela. A los 11 años me gustaba mucho visitar en vacaciones a mi tía en Motupe (Lambayeque – Perú) ella vendía fuera de su casa parrillada y anticuchos. Me llamó mucho la atención, ver cómo los trozos de carne insertados en unos palitos se cocinaban con el implacable fuego sin quemarse, pero esbozando un olorcito particular que hacía a las personas quedarse paradas alrededor de la parrilla esperando por su ansiada porción. Fue en ese entonces en que quise aprender no solo la entrega en el plato o la mano sino la preparación.
El anticucho es un plato típico peruano que como tal se popularizó durante la época colonial, siendo uno de los platos más importantes servidos a los esclavos del antiguo Perú. Se caracteriza por el uso de corazón de res insertado en un pincho y asados bajo el fuego de una parrilla. En Perú, es considerado un plato tradicional de las Fiestas Patrias, durante el mes de julio, como parte de las tradiciones gastronómicas de las festividades. Desde que aprendí hacer ese platillo, al regresar a mi casa de vacaciones siempre me pedían hacerlo, y cada vez que lo realizaba sentía la misma sensación que al estar en casa de mi tía, esa sensación de ver a la gente esperar su brocheta y terminar con una sonrisa de agradecimiento”.
- Nome da receita: Cochinita Pibil
- Nome da candidata: Josahandi Avila Pérez
- País de nascimento: México
- País de residência: Chile
Um trecho da história da receita:
“La receta original es de mi bisabuela Margarita, originaria de Yucatán. Mi abuelita se le enseñó a mi mamá y mi mamá a mí, pero es una receta en la que es difícil llegar a la cocción perfecta de la carne, hay que entender los tiempos al fuego y el manejo de los cítricos, más las cantidades exactas de los aliños para que no quede muy intensa pero tampoco puede quedar sin sabor. Yo recién logré llegar a la sazón cuando cumplí 18 años. A pesar de los esfuerzos de mi mamá por enseñármela no lo lograba, entonces mi abuela decidió guiarme hasta lograrlo. Con esta receta vendí tacos en México durante 3 años para ayudarme a pagar mi carrera de universitaria, me volví la taquera preferida de muchos transeúntes de Avenida Coyoacán. Es una receta a la que le debo mis estudios, pero sobre todo le debo la conexión con mi abuela y todo mi linaje materno acerca de cómo mantener nuestra sazón, de la importancia de nuestros estados de ánimo al cocinar, la conexión con los ingredientes para saber cuánto le pongo de cada uno.
Con los años he ido perfeccionando la receta, ahora la hago en Chile con toda la fusión de ingredientes de diferentes países. Creció, encontró su sazón peculiar. Con las enseñanzas en cocina también he ido aprendiendo que en la calidad de los ingredientes radica el sabor, por lo tanto en Chile apoyo al comerciante particular, la carne que ocupo para mis recetas siempre son de animales libres. En Chile se ha perdido mucho las carnicerías, las verdulerías, las fruterías, la mayoría compra en el supermercado y el pequeño comerciante ha ido desapareciendo. Yo extraño eso de México, poder salir y encontrarme con la señora que vende los limones de su limonero, el caballero que vende la carne de los animales de su granja que él cuida y mantiene. Así que esto trato de transmitir en clase a mis alumnos y también en cada receta que degustan mis comensales, hablar de lo importante que es la calidad de los ingredientes y su obtención. De alguna manera esta receta marcó mi emprendimiento, conexión y valor fue lo que me dejó”.
- Nome da receita: El Chipaguazu de Ña Mechi
- Nome do candidato: Santiago Carneri
- País de nascimento: Argentina
- País de residência: Paraguai
Um trecho da história da receita:
“El chipaguazú es una de la dos principales guarniciones de Paraguay. Es una comida universal en toda América, pero con detalles particulares en este país de inmensa cultura indígena guaraní. Es una comida accesible y popular. Se puede encontrar en casi cualquier bar o restaurante de Asunción o del resto del país. El maíz crocante de los bordes y la suavidad del maíz cocinado en el interior, mezclado con queso y cebolla es una explosión de sabores dulces, amargos, salados y ácidos espectacular. Y, como siempre en estos casos, la mejor receta es la de la madre o abuela del clan familiar.
La receta ha viajado con formas y proporciones distintas por todo el continente, desde el sudamericano chipaguazú paraguayo al norteño “Corncake” (pastel de maíz) afroestadounidense. Yo soy nacido argentino, criado español por padres migrantes, vuelto a migrar en busca de trabajo en 2012 y residente paraguayo desde hace seis años. Mi pareja paraguaya me abrió hace cuatro años un mundo de nueva cultura, historias y recetas. La más destacada y viajera es el chipaguazú. La madre de mi pareja, Ña Mechi, como es conocida en su gran familia de 20 hermanos y en su barrio de la periferia de Asunción, le debe su superviviencia y la de su hija a su buen oficio con la cocina, su fuerza de voluntad y su inmensa paciencia. Y su chipaguazú es mi favorito de todo Paraguay y, probablemente, del mundo”.
- Nome da receita: Mi Causa
- Nome do candidato: Deyvis Andy Davila Silvano
- País de nascimento: Peru
- País de residência: Uruguai
Um trecho da história da receita:
“La causa limeña es uno de los platos tradicionales del Perú, un plato infaltable en los agasajos familiares. Este plato data de la época del virreinato donde no se conocía con un nombre específico; fue con la llegada del libertador José de San Martín que para solventar los gastos de la campaña militar, en las esquinas de las calles limeñas se vendía este plato para apoyar a “la causa” de la independencia; es en este contexto en que el plato ganó el nombre de “causa”.
Este es uno de mis platos favoritos, el plato que se hacía esperar cada viernes al terminar la semana en el comedor popular donde mi abuelita cocinaba. Yo era infaltable y esperaba sentado en la mesa la llegada de mi platillo favorito, y al llegar primero lo comía todo junto lo que hacía sentir un sabor indescriptible, ese toque de limón, esa frescura y esa contundente papa amasada que te dejaba lleno. Luego me dio mucha curiosidad y cuando me servían el plato empecé a separar las capas de papa y los otros ingredientes para saber qué era eso que tanto me gustaba. Era aún pequeño y mi abuela no nos dejaba entrar mucho a la cocina por el miedo a quemarnos, siempre me quede con las ganas de aprender. Un día cuando tenía 13 años estaba en la secundaría, pidieron que preparáramos un plato para representar en el concurso por las fiestas patrias, en ese momento no dude que mi plato a presentar sería la causa. Le pedí a mi abuela que me enseñara y ella al ver mi emoción me enseñó.
Desde ese entonces siempre trate de mejorarlo y fue mi forma de agasajar y demostrar mi cariño a mi familia y amigos al prepararlo. Creo que fue esa experiencia la que me hizo estudiar cocina. Dicen que hay experiencias que te marcan y cada vez que hago ese plato, regreso ese viernes último de julio, en el centro de mi colegio junto con todos los otros platillos, esperaba con ansias al jurado para que probara mi preparación”.
- Nome da receita: Repochetas Nicaragüenses a lo Nica y a lo Tico
- Nome da candidata: Mabel Betania Castrillo Orozco
- País de nascimento: Nicarágua
- País de residência: Costa Rica
Um trecho da história da receita:
“Aprendí la receta de las repochetas de mi mamá. No sé nada sobre el origen, para mi las inventó mi madre porque eso fue lo que viví. Eran épocas difíciles. Después de la revolución sandinista vino la contrarrevolución. Yo no recuerdo nada de eso, era muy pequeña. Lastimosamente uno de mis tíos favoritos murió por esas horribles guerras. Aunque no se hablaba de eso, de segurito que la pobreza en que vivíamos fue fruto de todo ese proceso, aunque mi papá decía que era la tierra que estaba cansada y ya no producía como antes.
Se imaginan, mis papas debían mantener once hijos y así un día mi madre preparó una masa, le puso los frijoles molidos, la ensalada y la cuajada encima. Nos dijo: “Vayan a vender estas repochetas a la escuela”. Yo las llevaba a la escuela y al salir a recreo me ponía a venderlas a los compañeros. Un córdoba por repocheta y fueron un éxito. Con lo ganado ya podíamos comprar un poquito de carne para comer u otras cositas para el hogar. Incluso al pasar el tiempo ya nuestra madre nos daba un córdoba a cada hermano para comprarnos lo que quisiéramos.
Todos los hermanos aprendimos a preparar las repochetas y así se convirtió esto en un pequeño negocio familiar donde todos participábamos, incluido mi padre que se encargaba de mantener la milpa, el frijolar y los sembradíos de cebolla y tomate. Al principio fue en el recreo en la escuela, luego íbamos de casa en casa (lograba hasta cuarenta repochetas vendidas, se iban volando), luego ampliamos la venta en la escuela con el turno del colegio por las tardes y lográbamos colocar hasta 400 repochetas por día. Claro que ya a ese nivel teníamos que pagar a la escuela para poder mantener un puesto fijo. Toda la familia se dedicó a eso y lo hacíamos todo en conjunto.
(…) Cuando preparo las repochetas, los olores y los sabores, siento que me traslado hacia mi casa. En mi mente veo a mi madre ahí, siempre en su cocina, junto a la tabla limpiecita bien aseadita para preparar los alimentos (no teníamos cañería, sino que traíamos baldes de agua del pozo). (…) Las repochetas son como un consuelo para mi y me encanta ver a la gente comiéndolas con todo gusto y al final decir: “¡Qué ricas, deme otra! Eso me emociona”.
- Nome da receita: Pupusas Salvadoreñas a la Leña
- Nome da candidata: Sulma Pérez
- País de nascimento: El Salvador
- País de residência: Costa Rica
Um trecho da história da receita:
“Las pupusas salvadoreñas son la comida típica del El Salvador, probablemente por la tradición instituida de generación en generación. En el caso de esta receta fue una enseñanza de mi familia, a mi abuela le enseñó la suya, yo le enseño a mis hijxs y nietxs. Comúnmente se prepara en familia o para eventos comunitarios y fiestas populares nos reunimos grupos de mujeres a preparar pupusas, siendo esto un espacio de intercambio y trabajo colectivo. Los ingredientes en su mayoría son frescos del mercado o sacados de la huerta.
Esta receta se sigue conservando de generación en generación, ya que es una comida cotidiana, en la comunidad migrante salvadoreña y es común su preparación en casa de familias. La receta ha tenido que ser modificada ya que se ha tenido dificultad con conseguir ingredientes tradicionales como el loroco; y por motivos económicos y de salud se ha evitado hacerlas con carne, como se hace en la actualidad. Algunos ingredientes por lo que se reemplazan son el ayote rayado, los frijoles molidos, las espinacas y el tomate a cambio de la carne. En nuestro caso la mayoría cosechados de la huerta en casa, o comprados / truequeados a vecinos de la comunidad. La receta vegetariana ha despertado interés de personas vegetarianas o que prefieren alimentos sanos sin carne, por lo que se ha vuelto común en los últimos años.
En nuestra comunidad de Longo Maï, aquí en Costa Rica, es el plato más aclamado por el turismo y voluntarios que nos visitan, para festivales comunitarios, actividades de la iglesia y escuela. Actualmente hacemos talleres de pupusas a visitantes, con ventas de las mismas, ayudando a la economía familiar. Es común pasar a casa de cualquier persona de la comunidad y que te ofrezcan una deliciosa pupusa con café. Cada quien le pone su sabor y detalles personalizados haciendo esto una tradición que emigró también con nuestras familias y seguirá en la mesa de salvadoreñas, ticxs, nicaragüenses, etc”.
- Nome da receita: Sopes (pellizcadas)
- Nome da candidata: Erika Jennifer Solís García
- País de nascimento: México
- País de residência: Uruguai
Um trecho da história da receita:
“En la mayoría de los hogares mexicanos del centro y sur del país es muy común que se cocinen “sopes” (especialmente en el sur se le conocen como “pellizcadas” o “picadas”), y que la receta sea transmitida a las nuevas generaciones, sobre todo de madres a hijas. Sin embargo, nuestro caso fue diferente y particular (…) Estando en México se tiene acceso tan fácil a los “antojitos mexicanos” lo que muchas veces impide que nos aventuremos a la preparación de estos platillos, así que fue hasta que decidimos migrar (primero a Valparaíso, Chile y ahora a Montevideo, Uruguay) que descubrimos la necesidad de cocinarlos por cuenta propia, lo que sin duda significó un reto, sobre todo porque tuvimos que poner en práctica lo que recordábamos de aquellas domingos en familia, y ahora se ha convertido en un gusto personal y en la manera de acercarnos al sabor de casa. (…)
Quizá para mí, un poco más que para el resto de los migrantes, los sopes signifiquen tanto, ya que alrededor de ellos tengo acumulado una serie de recuerdos. Mi cumpleaños, al ser en septiembre, era celebrado siempre con una “kermés”, en el que mi madre cocinaba lo más mexicano que se le ocurriera, agua de horchata, jamaica y limón, para formar los colores de la bandera, papel picado y rebozos en las mesas, globos de color verde, blanco y rojo, yo vestida con botas y sombrero, y lo que nunca podía faltar eran los antojitos, entre ellos y mis preferidos, los clásicos sopes, bien dorados y con mucha crema. Claro que preparar sopes, ahora en Montevideo, nos remonta al olor de México en septiembre, con el montón de puestos de antojitos en el Centro de la ciudad, a los mexicanos con el fervor patrio de esas fechas, con la bandera tricolor en la cara, la música ranchera, el mariachi y el tequila. Viniendo de la capital no podemos negar que los sopes saben a México, son la combinación perfecta de los ingredientes básicos de nuestra cocina y de nuestra alimentación, el maíz, los frijoles y la salsa, infalibles en las mesas mexicanas con su mosaico de sabores y colores”.
- Nome da receita: Sopa de Platano Verde Frito
- Nome da candidata: Lorena Castellanos Rojas
- País de nascimento: Colômbia
- País de residência: Uruguai
Um trecho da história da receita:
“Mi abuela, quien nos ha transmitido estos conocimientos culinarios, aprendió la receta de su madre desde muy joven, ya que a la edad de 12 años mi abuela se encontraba huérfana y migrando del campo a la gran ciudad, Bogotá. Esta sopa no solo es mi sopa preferida, sino que al cocinarla me remonta a los años en que residía en Bogotá, pues su ingrediente principal, el plátano, tan consumido en mi país y en la región del Caribe, me conecta siempre con mi lugar de origen. El olor de la sopa me recuerda a mi país y la añoranza de recibir la llamada de mi abuela diciéndome “mijita, hice sopa de plátano venga a tomarse un platico”.
En cada oportunidad que regreso de visita a Colombia no puede faltar el plato de sopa de plátano frito esperando en la mesa, ya que el mismo no es un plato que tenga alguna fecha especial o época para ser preparado, solamente cumple el antojo de la nieta e hija menor, por lo tanto, se prepara en cualquier momento año. El hecho de migrar hacia otro país me permitió aventurarme por primera vez a realizar esta receta y a perfeccionarla cada vez más con el objetivo de que algún día sepa tan deliciosa como la de mi abuela, siendo un reto complicado porque ni la de mi mamá después de años de práctica sabe tan bueno. Es una receta que, a pesar de la distancia y la hibridación de mi alimentación con sabores y recetas locales me permite mantener las tradiciones culinarias de mi familia y resaltar muchos de los ingredientes cultivados por nuestros campesinos y consumidos por las familias populares de Colombia, al ser una receta de bajo costo.
(…) Cocinar esta receta y compartirla con los demás tiene suma importancia en el intercambio de los sabores y saberes presentes en los distintos platos de cada país, comunidad o familia, ya que nos permiten romper las fronteras, conocer y transmitir un poco del país y la cultura que se encuentra en los sabores, aromas y colores de cada plato”.
AS 4 MENÇÕES HONROSAS
- Nome da receita: Kipe de Zapallo o Kipe Hervido
- Nome da candidata: Nerina Raquel Dip
- País de nascimento: Argentina
- País de residência: Argentina
Um trecho da história da receita:
“Esta receta es resultado de una mezcla, de una unión entre dos pueblos, de un matrimonio y sus circunstancias de vida. De un deseo de dos culturas de fusionarse. Mi abuelo Elias vino de Siria y mi abuela Cecilia era de Simoca, un pueblo del interior de Tucumán, una pequeña provincia al norte de Argentina. La situación económica era fluctuante y tuvieron 8 hijos. El extrañaba mucho su comida, especialmente su kipe. Kipe/kippe/kipi/kupi/kibbeh… y otras varias formas de nombrar un plato muy conocido y cocinado en el norte de Argentina, el lugar más elegido por los árabes para instalarse. Pero ese es solo un detalle de la lengua.
Ahora, volviendo a la casa de mis abuelos, Cecilia aprendió de Elías a cocinar ese kipe de la nostalgia. Lo que él quería era degustar lentamente ese sabor que lo trasladaba miles de kilómetros y lo hacia regresar aunque sea con el paladar a la ciudad de Skelbie, de donde se había visto obligado a salir. No siempre había dinero suficiente para comprar carne molida para preparar el plato de la memoria. La mesa era larga y la carne era sin dudas el ingrediente más caro del plato original. Ella venía de una tradición culinaria criolla. Del maíz. Del trigo. De la papa. Del zapallo. (…) Cecilia fue al fondo de su casa y vio cómo había crecido aquel lindo zapallo criollo… ese que le dicen plomo por su color. Y quiso que Elías comiera su kipe… y tuvo un poco de esa “picardía criolla” y puso zapallo en vez de carne. Una versión vegetariana diríamos hoy. Y en esa prueba nació el kipe de zapallo de mi familia. Para Elías el plato era sirio, para Cecilia era su invención.
Treinta años después realicé un curso de posgrado en la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de Tucumán sobre Cultura Popular y cocina a cargo del Dr. Eduardo Rosenzvaig. El trabajo final consistía en un banquete de fusión con una reflexión sobre el origen de los ingredientes. Presenté este plato cocinado por mi mamá Delia y… gran sorpresa… era una receta que también cocinaban otras familias tucumanas…. Elías murió en 1970. Cecilia en 1985. En 2007 le regalé a mi madre Delia el libro Patrimonio culinario del Líbano del Chef Ramzi y juntas encontramos en la página 308 y en la 400 dos versiones de Kibbeh de Calabaza. No son iguales a la de Cecilia. Tienen sus variantes. Grande fue nuestra sorpresa. Cecilia nunca supo que inventó lo inventado. Elías nunca dijo que esa “invención” de Cecilia” era un plato conocido en Siria. Una de las pocas veces que el silencio pudo ser amor”.
- Nome da receita: El Plato Paceño
- Nome do candidato: Manuel Patricio Guzmán Masson
- País de nascimento: Equador
- País de residência: Equador
Um trecho da história da receita:
“Es lógico suponer que si los principales ingredientes del plato paceño (excepto el haba que proviene de Europa), se cultivan en tierras sudamericanas desde tiempos pre incásicos, éste plato se haya preparado en muy diversas versiones y tendencias a través de las épocas y los territorios. En mi caso particular fui conociendo la receta primeramente a través de Fanny (mi madre), quien seguramente la aprendió de mi abuela en las tareas de la casa y el campo. Y después lo aprendí de la cultura popular que sabe que la papa, el maíz , el melloco, los chochos, el tomate, el ají, etc, se siembran y se comen en la región andina desde hace al menos 6. 000 años; decantando su sabor en el agua que hierve en utensilios de barro, piedra y metal abrazados por el poder del fuego. Poder que bien conocen los habitantes de las tierras montañosas del Océano Pacífico.
Al ser un plato que se ofrece como sìmbolo de bienvenida, bienestar y celebración, y cuyos ingredientes- en los países tropicales andinos -pueden encontrarse durante todo el año, es un bocado fàcil de preparar en todo momento y por cualquier persona sin distingo de edad, credo, género o etnia. En el Inti Raymi, fiesta celebrada en honor al Sol y a la cosecha (de maíz) por ejemplo, la preparación de los alimentos implica todo un ritual social que inicia con el saludo a la plantas y a los elementos que permiten su crecimiento: la tierra el agua, la luz del sol. Entonces, el ritual atraviesa todo un arte de selección, pelado, desgranado, cocción, molienda, fritura, condimento, presentación y servicio. Arte en el que intervienen todos los miembros de la comunidad, del más grande al más chico, como un acto de amor sincero para recibir a los hermanos y hermanas que llegarán de todo lado para compartir los alimentos para el cuerpo y el espíritu, con la música y el baile del san juan y bebiendo la chicha de jora”.
- Nome da receita: Panza con pinol
- Nome do candidato: Blanca Viridiana Chanona López
- País de nascimento: México
- País de residência: México
Um trecho da história da receita:
“En la suma de aromas y sabores de la práctica alimentaria en Chiapas subyace un intrincado tejido vegetal y animal que forma parte de esa dinámica de tradición de su diversidad cultural y que se nos presenta en platillos cuyos sabores y colorido dan cuenta de la historia de la región y sus pobladores, así como de sus relaciones humanas, su historia económica, su imaginario literario y musical y sus representaciones del mundo en sus danzas y ceremonias, a lo largo de toda la geografía estatal.
Así ocurre con una de sus prácticas alimentarias vigente en un platillo tradicional que se consume en el municipio de Pijijiapan, en la Costa de Chiapas: la panza con pinol. La práctica por el consumo del desperdicio o desechos de la ganadería tiene, para el caso de una tradición alimentaria de la región del Istmo-Costa de Chiapas, su importancia debido a la herencia africana a través de la llegada de los esclavos negros en el siglo XVI a dicha región y su ulterior actividad en los curatos y en las estancias ganaderas conocidas como fincas (…)
Al paso del tiempo este platillo formó parte de esa herencia tradicional culinaria, que si bien ya no se llega a matar una res para la celebración del difunto o del casamiento por los costos elevados, se llegan adquirir al interior de la comunidad a través del comercio en los mercados. (…) Aunque los ingredientes se siguen adquiriendo dentro de la propia región, así como su preparación, el valor de este platillo ha cambiado a través de las nuevas generaciones porque algunas cocineras la preparan por ser de una herencia generacional, pero desconocen de la historia que guarda la misma dentro de ese sabor y olor, un poco porque siguen siendo comunidades marginadas y porque se asumen de esa forma por su misma condición afromestiza, como si de pronto quisieran borrar su historia para ser aceptadas al resto del mundo. Sin embargo, para las que las preparan, que ahora son las llamadas cocineras tradicionales, suele ser una forma de unión entre los mismos”.
- Nome da receita: Rosquillas Morenas -Dulzuras Zamoranas
- Nome do candidato: Belén E. Rodriguez
- País de nascimento: Argentina
- País de residência: Argentina
Um trecho da história da receita:
“Mi abuela Ernestina Ferreras de la Fuente nació en 1939 en Villarrín de Campos, Zamora, España. Tras la guerra civil, en el año 1956, emigró hacia Argentina junto con sus padres, hermanos y hermanas. Con ellos vinieron sus expectativas, sueños y las esperanza de una mejor vida. Pero tambièn trajeron parte de su tierra en cada bolsillo, en el acento, en las costumbres, en la cocina. Es así como gracias a ella, esta receta traspasó generaciones y fronteras. La historia remonta a mi tátara abuela, se llamaba María y falleció en Villarrin de Campos en el año 1945. Ella era panadera, pero en el pueblo no había panaderías tal como las conocemos hoy. La gente se acercaba a la casa de la panadera con la harina y cocinaba su propio pan en el horno para la familia.
En Villarrin de Campos, cuando se aproximan las fechas festivas tales como 1º de Mayo, el día de Cristo, bautizos, casamientos, entre otras, desde aquellos tiempos hasta la actualidad, los vecinos se juntan para cocinar varias docenas de rosquillas en el horno del panadero o panadera y luego las reparten. La receta de las rosquillas llegó a las manos de mi bisabuela, quien comenzó a hacerlas pero ahora no como oficio sino para consumo familiar. Con el golpe de la Guerra Civil y la difìcil recuperación del orden en el país, faltaba harina para cocinar y se vieron forzadas a pausar la tradición culinaria.
Al venir a Argentina mi bisabuela afortunadamente pudo retomar la tradición. Luego, tras su fallecimiento, la familia recordaba con anhelo las rosquillas, por lo que mi abuela decidió tomar las riendas y comenzar a cocinarlas; su padre le pasó la receta y a partir de ahí nunca más faltaron las rosquillas en las fiestas. (…)
En el año 2007 mi abuelo, también inmigrante español, junto con otros españoles, fundaron el Centro Castellano y Leonés en Bahía Blanca, un lugar de encuentro para aquellas personas oriundas de España y sus familias. Toda mi familia, y yo incluida, somos voluntarios de este Centro, colaborando en los eventos. Mi abuela, miembro de la comisión, asiste y organiza reuniones, cenas y té-bingo para recaudar fondos. Buscando homenajear la comida típica de su tierra, mi abuela propuso cocinar a los socios las tradicionales rosquillas morenas. Desde aquel día en que las sirvieron, son el infaltable de todos los eventos y siempre preguntan por “las masitas de Ernestina”. Se convirtieron en un símbolo tradicional para el Centro Castellano y Leonés, que con su sabor, la añoranza del pasado se hace presente en cada encuentro, reaviva recuerdos y alimenta los lazos interculturales”.
Equador selecionará júri externo para a Linha de Apoio ao Fortalecimento de Processos de Cultura Viva Comunitária
Em 02, set 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
Está aberta até 9 de setembro a convocatória para o júri externo de qualificação da Linha de Apoio ao Fortalecimento de Processos de Cultura Viva Comunitária, que será lançada pelo Ministério de Cultura e Patrimônio e o Instituto de Fomento das Artes, Inovação e Criatividades (IFAIC) do Equador.
O trabalho do júri externo será realizado no Equador, durante 15 dias. O IFAIC providenciará o traslado aéreo ou terrestre, hospedagem e alimentação durante o período estabelecido para o desenvolvimento do processo de avaliação e qualificação de postulações.
Poderão postular pessoas maiores de idade equatorianas ou estrangeiras que cumpram com o perfil profissional estabelecido, residentes em qualquer país. Os estrangeiros deverão ter suficiente domínio do idioma espanhol, escrito e falado.
Os integrantes do júri externo deverão demonstrar experiência no processo de gestão cultural em Cultura Viva Comunitária ou gestão cultural comunitária, ou ser membro de uma organização de CVC com experiência na gestão de projetos culturais comunitários, ou docente/acadêmico/pesquisador, que conte com publicações, ensaios ou palestras sobre o tema Cultura Viva ou Pontos de Cultura.
Inscreva-se para fazer parte do júri externo em:
▶️ www.fomentocultural.gob.ec/lf-culturaviva/
Encontro Nacional de Pontos de Cultura: conheça o projeto do Uruguai selecionado no Edital de Apoio a Redes 2019
Em 29, ago 2019 | Em Notícias | Por IberCultura
Nome do evento: Puntos y Cultura – Encuentro Nacional de Puntos de Cultura
Nome da rede: Encuentro Nacional de Puntos de Cultura
Organização responsável: COOPCAN25
Data prevista: 7 e 8 de dezembro de 2019
O Encontro Nacional de Pontos de Cultura de Uruguai, marcado para 7 e 8 de dezembro de 2019, será um evento para a integração, a interação e a interinstitucionalidade, com o propósito de fortalecer a rede e potenciar as capacidades e práticas culturais do território que visita – neste caso, Kiyú, um balneário do departamento de San José.
Neste espaço organizado para trocar saberes, práticas e conhecimentos, todas as atividades serão abertas, gratuitas e produzidas em conjunto por atores vinculados ao desenvolvimento cultural da comunidade. Mais de 60 organizações e coletivos estão envolvidos nesta proposta uruguaia selecionada no Edital IberCultura Viva de Apoio a Redes e Projetos de Trabalho Colaborativo 2019.
Para este encontro se pretende formar círculos da palavra que busquem incluir a Cultura Viva Comunitária nas decisões políticas e orçamentárias, além de organizar um plano de difusão e criar uma oficina de expressão corporal e sonora para facilitar os processos criativos, reflexivos e propositivos durante o evento. Também estão previstos um festival artístico de encerramento e uma marcha cultural pela preservação e o cuidado das águas.
As atividades estão destinadas tanto a integrantes da Rede de Pontos de Cultura do Uruguai como a habitantes da região onde se realiza o evento, e se dividem em cinco áreas: Saúde e bem-estar, Comunicação, Articulação cultural, Criação e Meio ambiente. Os Pontos de Cultura participam desde a criação, idealização e gestão do encontro, que conta também com o apoio da municipalidade, do governo departamental e do governo nacional.
Com esta articulação, os Pontos de Cultura buscam contribuir para a sistematização, quantificação e elaboração de metodologias e ações colaborativas para a construção e o fortalecimento das políticas de Cultura Viva Comunitária no Uruguai. Também esperam criar alianças público-privadas-comunitárias, facilitar a articulação em nível nacional entre os projetos culturais dos bairros e das áreas rurais, e consolidar linhas de trabalho intersetoriais que potenciem, criem e fortaleçam as políticas de base comunitária.