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IberCultura Viva apoya el rescate de la danza ndisakui en Tototepec, México

Preservar la cultura es mantener viva la memoria de un pueblo. Cuando escuchamos a los maestros y maestras de las tradiciones populares, aprendemos de sus saberes, rescatamos historias que podrían perderse y garantizamos que las futuras generaciones sigan tejiendo este legado. Cada expresión cultural preservada es un fuego que sigue encendido, iluminando identidades y fortaleciendo comunidades.

Con este compromiso, en 2024 IberCultura Viva destinó 2 mil dólares para apoyar el rescate de la danza ndisakui  (mono gigante), una manifestación cultural con más de 150 años de historia que estaba en riesgo de desaparecer. El proyecto «Rescate de la danza ancestral ndisakui  como patrimonio cultural de Tototepec (Yozononi), Tlapa de Comonfort, Guerrero», realizado en el marco del Convite Cultural «Mis raíces Yozononi», permitió la recreación de esta danza tradicional con la participación activa de la comunidad.

Esta iniciativa forma parte de la línea de acción «Reconocimiento y promoción de portadores/as y experiencias comunitarias de gestión del patrimonio cultural inmaterial» de IberCultura Viva, reforzando su papel en el fortalecimiento de la diversidad cultural iberoamericana.

El rescate cultural moviliza a diferentes generaciones

IberCultura Viva: impulsando la preservación cultural comunitaria

El financiamiento de IberCultura Viva fue esencial para la realización de este proyecto intergeneracional, que permitió rescatar los elementos esenciales de la danza ndisakui  y reintroducirlos en la comunidad. Con el apoyo del programa, en colaboración con la Secretaría de Cultura de México, se llevaron a cabo investigaciones y diálogos con habitantes de Tototepec, como la señora Guadalupe Rivera León, quien proporcionó piezas originales de la danza, y el carpintero Guillermo Arias, responsable de reproducirlas y garantizar su preservación.

Además, el proyecto contó con la colaboración de artesanos y especialistas en pirotecnia, quienes recrearon los trajes y accesorios tradicionales, asegurando la fidelidad estética de la danza. La representación muestra a una figura masculina y una figura feminina de gran tamaño, tallados en madera y recubiertos con petates de palma. La feminina viste un rebozo negro, mientras que la masculina usa un sombrero y un gabán de lana, simbolizando la identidad local. En el momento final de la presentación, los personajes se encuentran mientras la pirotecnia artesanal ilumina el espectáculo.

La memoria viva es celebrada por la comunidad

Celebración, documentación y transmisión a futuras generaciones

Con el respaldo de IberCultura Viva, el proyecto culminó con una gran celebración en la Capilla de la Virgen de Guadalupe, en Tototepec, donde la comunidad pudo revivir esta danza tradicional, acompañada de la danza del torito. Durante la festividad, se llevó a cabo una procesión en la que se compartieron platillos típicos, resaltando la importancia de la cultura local.

Para garantizar la continuidad y transmisión de este patrimonio cultural, todo el proceso fue documentado en un cortometraje, permitiendo su amplia difusión y preservación. El proyecto contó con la participación de 55 personas, de las cuales más de la mitad son hablantes de la lengua Tu’un Savi, promoviendo también la valorización de las lenguas indígenas en la región.

Mira el video aquí:


Además, el señor Sabino Castañeda, habitante de Tototepec, se comprometió a mantener activa la danza durante los próximos cuatro años, asegurando su permanencia en la comunidad y fortaleciendo el vínculo entre tradición y sentido de pertenencia.

IberCultura Viva: un compromiso con las culturas vivas comunitarias

IberCultura Viva, como programa de cooperación técnica y financiera entre gobiernos iberoamericanos, ha sido un importante impulsor de iniciativas comunitarias para la preservación cultural. El rescate de la danza ndisakui  es un ejemplo de cómo el programa apoya a las comunidades en la protección y valorización de su patrimonio inmaterial, promoviendo políticas públicas que fortalecen la diversidad cultural en los territorios.

Gracias a esta colaboración entre IberCultura Viva y el Convite Cultural “Mis raíces Yozononi”, la danza ndisakui  renace en Tototepec, reafirmando la importancia de preservar y fortalecer las expresiones culturales comunitarias que construyen la identidad y la memoria de los pueblos iberoamericanos.