Cultura Viva: un diseño construído punto a punto en el Espacio Iberoamericano

Fotos: Georgina García/Puntos de Cultura

Cuando le preguntaron a Célio Turino si necesitaba algo especial para su conferencia magistral en el 3º Encuentro Nacional de Puntos de Cultura de Argentina, este miércoles (30/11) en Buenos Aires, el historiador brasileño –uno de los creadores e impulsores del programa Cultura Viva– les pidió una escalera. Como le gusta hablar desde la improvisación, no pensó en video, powerpoint, nada de eso. Sólo quería una escalera para mostrar cómo la imagen creada para el evento (varios círculos juntos, conformando el número 3) tenía mucho que ver con la idea de los Puntos de Cultura.

“Existen puntos cerrados, abiertos, pequeños, grandes, con más o menos color, conformando esta imagen. Creo que ahí está la belleza de los Puntos de Cultura y de la Cultura Viva”, comparó el ex-secretario de la Ciudadanía Cultural del Ministerio de Cultura de Brasil (2004-2010). “Cada uno, de manera diferente, produce este proceso de intersecciones. Y esas intersecciones van permitiendo que un círculo se conecte con otro y otro… O sea, este círculo podría tener una forma diferente al otro. Sin embargo, cuando se conectan ellos cambian y conforman cosas, como esta imagen.”

Estas ideas –de que Cultura Viva es un diseño construído punto a punto, y de que muchos puntos reunidos pueden de hecho cambiar las cosas –dieron el tono al 1º Encuentro de Redes IberCultura Viva, abierto ayer (30/11) en el Centro Cultural San Martín, en Buenos Aires. El evento tiene programación en conjunto con el 3º Encuentro Nacional de Puntos de Cultura, realizado por el Ministerio de Cultura de Argentina, y sigue hasta el viernes (02/12) con una serie de actividades que reúnen a representantes de gobiernos y de organizaciones comunitarias de 17 países iberoamericanos.

Mesas de apertura

El 3º Encuentro Nacional de Puntos de Cultura empezó con el habla de Enrique Avogadro, secretario de Cultura y Creatividad del Ministerio de Cultura de Argentina. “El Estado pierde cada vez el monopolio estricto de las políticas públicas porque aparece otro concepto muy interesante, que es el de la inteligencia colectiva. O sea, la idea de que todos juntos pensamos mucho mejor que cada uno de nosotros por separado”, comentó. “Por lo tanto, las políticas públicas tienen que ser en red. Una red cada vez fuerte no solo por la formación, por la capacitación, sino fundamentalmente por la posibilidad de intercambio.”

La Red Nacional de Puntos de Cultura de Argentina actualmente cuenta con 650 organizaciones socioculturales. Gran parte de ellas estuvo representada en la apertura del encuentro. Cerca de 500 personas asistieron a los discursos de la mesa de apertura, compuesta por Enrique Avogadro, por el ministro de Cultura de la República Argentina, Pablo Avelluto, y por Alejo Ramírez, director sub-regional para el Cono Sur de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB).

Ramírez habló del protagonismo ejercido por la cultura en los programas de cooperación iberoamericanos (de los 25 programas e iniciativas de SEGIB, el 70% está vinculado directamente a los temas culturales). Habló también de IberCultura Viva, un programa nuevo (su primera reunión se dio en 2014, en la “Teia”, el Encuentro Nacional de Puntos de Cultura de Brasil), “con una vigencia y una actualidad muy importantes, incluso por mostrar  cómo la inteligencia colectiva toma el control de determinados espacios y cómo desde la cultura se rompe la lógica centro-periferia”. Al final, reforzó lo que Avogadro había dicho poco antes: “Inteligencia colectiva es lo que más necesita nuestra región”.

Inclusión y ciudadanía

El ministro Pablo Avelluto, el tercero a hablar en la mañana de este miércoles, destacó las áreas en que el programa Puntos de Cultura trabaja simultáneamente, como la promoción y la defensa del patrimonio cultural, el desarrollo de la creación artística e cultural de las comunidades, el impacto de las industrias creativas. Y llamó la atención especialmente hacia el rol de la cultura como herramienta para la inclusión de la ciudadanía.

«Cuando nos encontramos con el desarrollo que había alcanzado el programa los últimos años nuestro compromiso fue ampliarlo, perfeccionarlo, facilitar el acceso, articular mejor las redes, mejorar el resultado en términos de inversión”, afirmó Avelluto. “Compartimos profundamente la ideología de este programa. No se trata de una opción partidaria. Más allá de eso, tiene que ver con las maneras en las cuales, a través de la cultura, generamos inclusión y ciudadanía”.

Con el programa, según el ministro, se generó la posibilidad de que miles de argentinos, conectándose con organizaciones de la sociedad civil, puedan acceder, profundizar y mejorar el acceso a sus propios derechos. En este caso a los derechos culturales. “Por eso, el sentido profundo del desarrollo de la cultura comunitaria. La palabra del día hoy es comunitario, aquello que tenemos en común, cada uno de los ciudadanos que habitan nuestro país en su producción simbólica. El sentido comunitario es el aspecto ideológico más profundo que atraviesa cualquier distinción partidaria y que garantizará que este programa se mantenga, siga mejorando y siga creciendo.”

Trabajo común

Enseguida tomaron lugar en la mesa Diego Benhabib, coordinador de los Puntos de Cultura de Argentina, y Daniel Castro, coordinador-general de Promoción de Ciudadanía y Diversidad Cultural del Ministerio de Cultura de Brasil y representante de la presidencia de IberCultura Viva.  (Brasil tiene la presidencia del Comité Intergubernamental del programa desde 2014, en un mandato de tres años)

 

Después de saludar a los trabajadores de cultura presentes, aquellos “que trabajan para que nuestras naciones se parezcan consigo mismas”, Castro afirmó que IberCultura Viva busca ser un espacio de encuentro, de intercambio y fortalecimiento de políticas con sentido territorial de base comunitaria, en el ámbito iberoamericano. Resaltó que el programa cuenta actualmente con nueve países miembros (Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, El Salvador, España, México, Perú y Uruguay), pero que allí se encontraban muchos otros, “en proceso de acercamiento y construcción de otros espacios, de otras formas de integración”.

“El importante es el trabajo común entre los interlocutores gubernamentales y la sociedad civil en todos estos países. Que se construyan puentes, que se pueda vivir en espacios de cooperación, trabajando para transformar las relaciones de desigualdad y de falata de respeto”, afirmó, destacando también algunos elementos cruciales de la política de Cultura Viva, como la participación social, las instancias autónomas de la representación de la sociedad civil, la gestión compartida, el diálogo.

“El Estado necesita la inteligencia de la gente que trabaja con cultura para transformar el Estado en sí mismo. Al vivir los mecanismos que el Estado implementa, con sus dilemas, sus problemas, la sociedad nos trae una devolución crucial para construir nuevas formas de apoyo, fomento, participación social, reconocimiento simbólico. Nos falta mucho para llegar a instrumentos que realmente estén adecuados a la realidad, que den énfasis a los resultados alcanzados por los proyectos que reciben recursos públicos, y no simplemente enfocando en excesivos detalles la rendición de cuentas financiera.”

La importancia de acercamiento entre los gobiernos, municipales y provinciales fue otro punto mencionado por Daniel Castro, así como la relevancia de políticas transversales y complementarias en el campo social. “Es una política sociocultural lo que se trata acá, o sea, es importante que existan fuertes políticas, que estén actuando de forma integrada, en el campo de los derechos humanos, acciones dirigidas a los pueblos originarios, afrodescendientes y otros pueblos y comunidades, de promoción de igualdad de género, igualdad racial, salud, educación y comunicación.

Nuevos Puntos

Diego Benhabib, a su vez, dijo que la propuesta del programa Puntos de Cultura en Argentina es apoyar las acciones de organizaciones de la sociedad civil con proyectos socioculturales en territorio, y también a las redes de cultura comunitaria en el país. “La idea de organización es el punto, el eje central de esta política. Creemos que tiene que ser así porque un individuo puede alcanzar sus objetivos, pero trabajando con otros esos objetivos pueden ser mayores. Lo mismo ocurre cuando una organización trabaja en su territorio o en conjunto con otras. Al trabajar con otras organizaciones el impacto de sus acciones es mucho mayor. La red preexiste al programa. Fortalecerla es uno de los ejes centrales de la política de Puntos de Cultura este año.»

Benhabib también destacó los resultados de la cuarta convocatoria de Puntos de Cultura, lanzada este año. Se recibieron más de 850 proyectos –después de tres instancias de selección fueron premiados 228. Estos nuevos Puntos de Cultura son de 116 localidades, de 21 provincias argentinas, y tienen perfiles muy variados: bibliotecas, clubes deportivos, centros comunitarios, centros barriales, colectivos de educación popular, etc.

Anfitrión del encuentro, el coordinador dedicó parte de su intervención a la programación, explicando cómo serían los tres días de conferencias, capacitaciones, talleres, foros, grupos de trabajo temáticos, muestras de producciones artísticas y espectáculos. Este primer día pasaron por el escenario, entre otros, el maestro charanguista Jaime Torres, uno de los mayores de la música folclórica argentina, y la cantora y antropóloga salteña Silvia Barrios.

Grupos de trabajo

La tarde del primer día estuvo dedicada a una serie de talleres simultáneos para los Puntos de Cultura argentinos. Entre las temáticas abordadas estuvieron “Gestión cultural de las organizaciones”, “Presentación de proyectos culturales” y “Sistematización de experiencias comunitarias”. Mientras los argentinos seguían con las actividades, realizadas al mismo tiempo en diferentes aulas del Centro Cultural San Martín, los invitados del 1º Encuentro de Redes Ibercultura Viva se dividieron en tres espacios, en los siguientes grupos de trabajo:  “Participación social y cooperación cultural”, “Legislación para las políticas culturales de base comunitaria” y “Formación en políticas culturales de base comunitaria”.

Coordinado por Fresia Camacho, directora de Cultura del Ministerio de Cultura y Juventud de Costa Rica, el grupo “Participación social y cooperación cultural” reunió a cerca de 30 personas. Uno de los objetivos del grupo, además del intercambio de experiencias, es avanzar en la construcción de una mesa intersectorial de la sociedad civil de acompañamiento del programa IberCultura Viva.

Daniel Castro se quedó a cargo de la coordinación del grupo “Legislación para las políticas culturales de base comunitaria”, con ocho integrantes. Esta mesa de trabajo aborda los avances en el campo legislativo y jurídico-administrativo, desde las experiencias de las leyes aprobadas en Brasil y Perú (representado por Paloma Carpio, coordinadora del Programa Puntos de Cultura entre 2012 y 2015). También busca estimular la creación y el perfeccionamiento de normas que fortalezcan las políticas públicas del área. El tercer grupo, conformado por 20 personas y coordinado por el salvadoreño Alexander Córdova, tendrá dos temas a tratar en estos tres días de encuentro: la construcción de mapas e indicadores y la formación en políticas culturales de base comunitaria.

La programación prevista para el sábado (03/12) estará abierta apenas para los representantes de gobiernos del programa: se realizará la 5ª Reunión del Comité Intergubernamental IberCultura Viva, que con las recomendaciones y espíritu de los grupos de trabajo avanzarán en la definición de prioridades estratégicas y reflexiones inspiradoras para el desarrollo de las políticas públicas y de la cooperación. El último encuentro de los países miembros fue en Costa Rica, en junio de este año.

 

Sepa más: 

https://encuentropdc.cultura.gob.ar/